Objetivo: Proteger la riqueza natural de Canarias

Una ley que impide talar árboles de más de 15 años o el impulso junto a otras regiones macaronésicas de un santuario marino, hitos de 2022

El pino esrengado de  Arico, uno de los árboles singulares de Canarias.  (L)  | ANDRÉS GUTIÉRREZ

El pino esrengado de Arico, uno de los árboles singulares de Canarias. (L) | ANDRÉS GUTIÉRREZ

Miguel Ayala

Miguel Ayala

Nunca es tarde para salvaguardar la riqueza medioambiental del planeta. Un asunto que, sin embargo, en el caso de un territorio tan frágil como el del Archipiélago canario tiene un extra de preocupación al tratarse no solo de uno de sus principales atractivos turísticos sino, además, porque su deterioro podría acarrear importantes cambios en el día a día de una población que históricamente ha presumido de sus cuatro Parques Nacionales, los 146 espacios protegidos -alrededor de 300.000 hectáreas en las ocho Islas- o las siete Reserva de la Biosfera con las cuales ha distinguido la Unesco la riqueza natural de Canarias tanto en el medio terrestre como en el marino.

Es tal el grado de conciencia que este asunto ha despertado entre las autoridades e instituciones canarias que a lo largo de este año se aprobaron leyes e impulsaron medidas destinadas a proteger el territorio isleño y su entorno más próximo como, por ejemplo, poner en marcha junto a Madeira y Azores de un santuario marino para proteger la biodiversidad de las aguas de la Macaronesia.

El Parlamento de Canarias ya presentó en mayo una Declaración Institucional sobre la Conservación de la biodiversidad marina de Canarias.

Avivar y contribuir a que las sociedades, empresas, entidades y gobiernos macaronésicos pongan en marcha medidas para preservar sus recursos naturales, desarrollen herramientas para la recuperación de las especies que componen los ecosistemas y fomenten el uso sostenible del territorio son los principales pilares donde se apoya esta propuesta.

En esa misma línea se sitúa la propuesta aprobada en julio por el Parlamento canario para tramitar una ley que impida la tala y poda drástica de árboles. Una de sus principales medidas es la prohibición de cortar en las Islas especies de más de quince años de edad.

El desmantelamiento de la Refinería de Santa Cruz de Tenerife, iniciado por Cepsa en mayo pasado, supone otro hito medioambiental de Canarias al cual se suma que Red Eléctrica haya logrado luz verde para iniciar la construcción de la Central hidroeléctrica de bombeo reversible de Salto de Chira, en Gran Canaria.

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