El recién nombrado consejero de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno canario, Isaac Castellano, descarta que se reproduzcan en las Islas los ataques al turismo que sufren Barcelona o Baleares. Entre otras cuestiones, porque "el principal valor añadido que todos los operadores turísticos reconocen al destino es la amabilidad y el carácter hospitalario de la gente, y eso no es algo que pueda desaparecer de un día para otro".

No obstante, recomendó ser "muy observadores de la realidad que se vive en otros destinos" como mejor medicina para "ser capaces de prever hasta qué punto los motivos de conflicto de otros destinos se pueden reproducir" en el Archipiélago. "Los canarios sabemos que el turismo es el motor económico del Archipiélago y que de él dependen muchísimos empleos directos y una buena parte de los indirectos", destaca el nuevo integrante del gabinete de Fernando Clavijo.

Incidiendo en un plano más personal, el consejero reseña que, estadísticas al margen, no hay prácticamente ningún isleño que no tenga "a más de un familiar o amigo" trabajando o cuya carrera laboral esté "relacionada con el turismo". El Ejecutivo autonómico es además consciente de la importancia de que los beneficios del sector alojativo reviertan en otros ámbitos económicos; por justicia y porque el "modelo productivo global" gane en solidez.

También resulta clave para Castellano la atracción de un perfil de turista con inquietudes más allá del sol, la playa y salir de noche. Por ello, se han puesto en marcha sendas plataformas destinadas a captar visitantes ávidos de conocer la gastronomía y la cultura locales. Y, del mismo modo, el consejero entiende que el reparto de los réditos debe llegar también a los trabajadores. De ahí que el Gobierno canario haya introducido en el modelo educativo novedades para mejorar la "cualificación de los trabajadores del sector". La falta de conocimiento de otros idiomas ha sido un obstáculo perenne.