Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias

La diferencia principal radica en las circunstancias del despido y las opciones que tienen tanto la empresa como el trabajador

Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias.

Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias. / LP/DLP

Cuando un trabajador se ve enfrentado a un despido y considera que este no está justificado, tiene la opción de reclamar ante un juez en un plazo de 20 días hábiles. En este proceso, el juzgado puede determinar si el despido es procedente, improcedente o nulo. En esta guía, nos centramos en explicar qué implica el despido improcedente y cómo se diferencia de los otros dos tipos.

¿Qué es un despido improcedente?

Solo un juez tiene la facultad de declarar un despido como improcedente. Esto ocurre cuando el despido no se ha llevado a cabo conforme a la ley. Puede ser porque no está justificado en causas legales, las razones presentadas son insuficientes o desproporcionadas, o el procedimiento legal establecido no se ha seguido adecuadamente.

Motivos del despido improcedente:

  • Cuando no se justifica en causas legales o se ampara en la ley de manera inadecuada. Esto sucede cuando se despide a un trabajador sin una razón válida, los motivos dados no están respaldados o son falsos, o la medida disciplinaria es desproporcionada a la falta cometida.
  • Cuando la empresa no cumple con el procedimiento legal establecido en el Estatuto de los Trabajadores. Esto incluye casos donde el despido no se notifica por escrito, no se otorga el preaviso adecuado de 15 días (excepto en el despido disciplinario), o no se paga la indemnización correspondiente.

Consecuencias y efectos del despido improcedente:

El Estatuto de los Trabajadores establece que una vez que se declara el despido como improcedente, la empresa tiene cinco días para decidir entre dos opciones:

  • Readmitir al trabajador en las mismas condiciones previas al despido, abonándole los salarios de tramitación que dejó de percibir desde la finalización de su contrato.
  • Pagar una indemnización calculada a razón de 33 días de salario por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades.

Si la empresa no toma una decisión dentro del plazo establecido, se considera que ha optado por la readmisión del trabajador.

Muere de un infarto tras recibir la carta de despido cuando estaba de baja

Muere de un infarto tras recibir la carta de despido cuando estaba de baja / LP/DLP

Diferencias entre improcedente, procedente y nulo:

La diferencia principal radica en las circunstancias del despido y las opciones que tienen tanto la empresa como el trabajador.

Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias.

Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias. / Unsplash

Mientras que en un despido procedente la medida se considera justificada y el trabajador no recupera su empleo, en los casos de despido improcedente o nulo, el trabajador tiene la posibilidad de ser reincorporado a su puesto laboral.

Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias.

Entendiendo el despido improcedente: causas, consecuencias y diferencias. / Unsplash

La declaración de nulo se reserva para los casos en los que, además de no estar justificado, el despido vulnera los derechos fundamentales del trabajador.