La sostenibilidad del planeta empieza por los pequeños gestos en las comunidades locales y son los ciudadanos los que deben tomar la iniciativa sin esperar a que sean los gobernantes los que marquen el ritmo de la lucha contra el cambio climático. El Seminario Internacional de Comarcas Sostenibles concluyó ayer en Agüimes con la lectura de media docena de ponencias y un debate final en el que expertos de varios países mostraron ejemplos de cómo se puede preservar el medioambiente desde actuaciones a pequeña escala en el propio hogar o en el barrio.

La clausura de este encuentro organizado por la Mancomunidad del Sureste estuvo dedicada a exponer experiencias de éxito en el ámbito de la sostenibilidad, como la ruta de la soberanía energética en la isla de La Palma, la economía circular en el pueblo madrileño de El Boalo, el proyecto de residuos urbanos de la localidad inglesa de Peterborough, los "paisajes comestibles" en la ciudad alemana de Hamburgo y en Fuerteventura, o la mejora de la situación de la mujer en las aldeas de Madagascar a través del diseño industrial. En todos los casos se trata de acciones a pequeña escala y protagonizadas por ciudadanos comprometidos con el medio ambiente.

La segunda jornada del Seminario, moderada por los periodistas Antonio Cacereño, director de LA PROVINCIA, y Miguel Ángel Daswani, incluyó una ponencia de Georg Horn, director de la iniciativa ecológica Terra Preta, titulada P aisajes comestibles y tierras negras en un contexto permacultural: un proyecto en Hamburgo y Fuerteventura, en la que narró los resultados de sus experimentos para recuperar la fertilidad de los suelos,

Horn, que comparte las nacionalidades alemana y española porque nació en Tenerife, trabaja en una institución de Harburgo que se dedica a la reinserción de jóvenes delincuentes a través del trabajo social. Tras vivir en Japón y Canadá, se interesó por las propiedades del carbono en la agricultura y la jardinería y desde hace dos años dirige 17 proyectos de huertos urbanos en Hamburgo. Allí ha diseñado un espacio de 14.000 metros cuadrados en plena ciudad donde se cultivan papas, tomates, hortalizas y flores. También ha experimentado en Fuerteventura con la tierra negra, resultado del compostaje con carbono, concretamente en un proyecto de fertilización del suelo en Puerto del Rosario en colaboración con el director de la Reserva de la Biosfera, Tony Gallardo.

Fertilidad

"La pérdida de la fertilidad es un drama en Fuerteventura y si no logramos cubrir la primera capa de cinco centímetros del suelo acabaremos con la vida vegetal y animal en la mayor parte de la isla", alertó Horn en referencia a la proliferación del ganado asilvestrado.

Katy Thomas, en una ponencia titulada El caso de Peterborough. Creando un proyecto urbano de economía circular y sostenible, mostró los resultados de su trabajo en esta pequeña localidad situada del norte de Londres, centrado en los intercambios de todo tipo de productos entre la población, con especial atención a la reducción de residuos orgánicos.

Roque Calero, catedrático de Ingeniería de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, y Carmelo di Bartolo, diseñador industrial en Milán, explicaron sus puntos de vista sobre la planificación energética en la ponencia Evolución hacia la sostenibilidad.

La última intervención del seminario, titulada Estrategias municipales para pasar de la utopía a la realidad, corrió a cargo del alcalde de El Boalo, un referente español de sostenibilidad por crear un rebaño de cabras de propiedad colectiva para salvar la especie guadarrameña, a punto de desaparecer en la sierra de Madrid.