Más de 3.100 rayos, superando la marca de octubre de 2018, una nevada en el Teide, la primera de este otoño, unos asombrosos pirocúmulos provocados por la incidencia de la lluvia sobre la lava del volcán de La Palma y un caos de tráfico en ambas capitales canarias, son algunos de los cuadros que ha dejado el paso del frente asociado a una borrasca atlántica que desde la noche del jueves ha ido barriendo al archipiélago de oeste a este, sin que curiosamente dejara una gota, al menos hasta últimas horas de la tarde de este viernes, en Fuerteventura, como si fuera una isla ajena a la inclemencia.
Y eso que Canarias este viernes marcó la pauta meteorológica nacional con los 45,2 litros por metro cuadrado, máxima del país, registrados en Agulo, La Gomera, mientras que en la isla de Gran Canaria, los mucho más discretos 16 litros por metro cuadrado anotados en la plaza de la Feria antes de caer la noche, máxima insular, eran suficientes para dibujar un caos, entre otras por la falta de fluido eléctrico en los semáforos y el desbordamiento de alcantarillas. La siguiente cantidad reseñable en los pluviómetros grancanarios la ofrecía Teror, con algo más de doce litros por metro cuadrado.
En el resto del interior no superaron los cinco litros por metro cuadrado, o con apuntes nsignificantes, lo que no fue obstáculo para cortes de luz esporádicos en Maspalomas, o atascos de hasta dos horas y media para recorrer la distancia entre Telde y Vecindario, además de provocar distintos accidentes por alcance como el ocurrido en Santa Brígida por la tarde y derribos de mobiliario urbano en distintas localidades.
Y es que el viento también capitalizaba este viernes las mayores marcas del país, con rachas de 89 kilómetros por hora en la estación de Izaña, en Tenerife, a la que seguían otros potentes vendavales en Agaete, donde se registraban vientos de hasta 78 kilómetros por hora durante la mañana. También en Telde se hacía notar su potencia con rachas de 63 kilómetros por hora y que podrían ir en aumento durante el día de este sábado, ya que se esperan vientos fuertes tanto en el noroeste como en las vertientes suroeste.
En detalle, las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología apuntan para este sábado más lluvias, que podrían ser localmente fuertes en las islas de la provincia de Las Palmas, aunque reduce esta posibilidad en horas de la madrugada, con un aviso amarillo vigente por este motivo hasta las cinco de la mañana.
En cualquier caso seguirá el tiempo húmedo durante toda la jornada con unos cielos que presentarán intervalos nubosos más compactos que dejarán registros en la mitad norte de las islas y en el interior, sin descartar entregas con intensidad y en forma de chubascos en Gran Canaria. También descenderán las temperaturas en la isla redonda, no así en Lanzarote, La Graciosa y Fuerteventura donde se mantendrán estables o incluso en un ligero ascenso.
En Tenerife y La Palma no se descartan heladas, mientras que en las cotas más altas de Gran Canaria se espera que se repitan mínimas como las de este viernes, que fueron inferiores a los cinco grados centígrados en Llanos de la Pez a la una de la tarde, o de apenas 5,8 grados en Cruz de Tejeda en horas de la madrugada.
Esto por tierra, ya que por el litoral norte se espera un mar de fondo con olas de hasta tres metros, por lo que se debe extremar la precaución tanto en playas como en acantilados.
Previsión para el domingo
Para el domingo el tiempo continuará desapacible, de nuevo con cielos cubiertos por nubes muy compactadas y con lluvias que pueden caer una vez más en forma de chubascos en el interior de Gran Canaria, con menos posibilidades de que reciban lluvias las dos islas más orientales, según la agencia estatal.
Las temperaturas, sin embargo, serán un poco más suaves, con un ligero ascenso de las mínimas.
El viento no pierde protagonismo porque puede soplar con intervalos de fuerte en el noroeste y sureste, así como en las cumbres de las islas más altas y en el interior de Lanzarote y Fuerteventura a últimas horas del día.
El inicio de la última semana de noviembre en Gran Canaria continuará en la misma tónica, con cielos encapotados, lluvias, incluso chubascos en el interior y vientos en el noroeste y sureste, mientras que en las islas de La Graciosa, Lanzarote y Fuerteventura podrían disfrutar de claros a partir del mediodía del lunes, eso sí, con unas temperaturas similares, cuando no en ligero descenso, en un panorama que se repetirá casi calcado el martes.