El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, ha anunciado la conclusión antes de un mes de todas las obras de muros que el Ayuntamiento ha emprendido en el último trimestre del año para reparar y reponer cinco muros que se derrumbaron o resultaron dañados con el temporal de lluvias de octubre de 2015. El regidor realizó estas declaraciones este martes durante un recorrido, junto a la concejala de Fomento, Servicios Públicos y Carnaval, Inmaculada Medina, y la concejala del Distrito Vegueta-Cono Sur-Tafira, Lourdes Armas, a la obra de reparación del muro de la Carretera del Centro o del Árbol Bonito, que se prevé que esté finalizada por completo antes del Día de Reyes.

Los fondos de los proyectos financieramente sostenibles que este gobierno municipal logró desbloquear el pasado verano, han permitido que se pusieran en marcha la reparación de cinco muros que sufrieron graves daños estructurales tras las lluvias torrenciales del año 2015, incidencias que han llevado al corte de calles y accesos a algunos barrios.

Para poner en marcha estas obras de reparación, el área de Vías y Obras del Ayuntamiento está empleando 885.000 euros repartidos en cuatro actuaciones distintas localizadas en los distritos Centro, Vegueta-Cono Sur-Tafira y Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya. Se trata del proyecto de reparación y rehabilitación de muros más grande y ambicioso puesto en marcha por el Ayuntamiento en los últimos años.

La actuación de muros más importantes de las cinco que fueron licitados por la Empresa Municipal de Urbanismo (Geursa), ha sido la de la carretera del Centro (GC-197), más conocida como del Árbol Bonito, que recorrieron hoy el alcalde Hidalgo y las concejalas Medina y Armas. Este paramento de casi un siglo de antigüedad, fue el que peor sufrió los embates de la lluvia de 2015, que provocó su derrumbe parcial y ocasionando el cierre de la vía por la caída sobre la misma de piedras de gran tamaño que formaban parte del muro.

Para su reparación, el Ayuntamiento ha invertido 351.714 euros con los que se han reformado y reconstruido unos 400 metros lineales del muro. Actualmente se ha abierto al tráfico uno de los dos carriles de la vía que permanecía bloqueada y se están acabando los remates para ampliar las aceras y crear una nueva zona de aparcamientos que no existía. La intención del Ayuntamiento es dejar la vía reducida a un solo carril para mejorar el tránsito peatonal por aceras más amplias.

Entre las actuaciones que se han hecho en el muro del Árbol Bonito están la demolición de un metro y medio de la parte superior del mismo, su claveteado al suelo, la excavación de su frente para instalar una viga de atado, la ejecución de una red de drenajes para el agua de lluvia y la protección del talud de tierra superior para que no vuelva a ejercer presión sobre el mismo cuando se empapa, como ocurrió hace un año.

En los sectores en los que se ha descubierto que el muro es más inestable, por su antigüedad, se ha excavado y demolido para ejecutar un nuevo paramento de hormigón aunque utilizando el revestimiento de piedras que siempre ha lucido. Aquí también se instalaron drenajes nuevos y se protegió el talud superior.

Las otras actuaciones en marcha son la reparación de los muros en las calles Salamanca y San Cristóbal de La Laguna en el barrio de Pedro Hidalgo, con un presupuesto de 144.794 euros; y un muro de contención en el Dragonal Bajo con una inversión de 123.617 euros. Mención especial merece la reparación del muro de la calle Ana Benítez, que ha requerido de una intervención especial tras descubrirse la obra afecta a una línea de alta tensión.

Este imprevisto ha obligado a Geursa a tener que realizar a toda prisa un nuevo proyecto de obra y a una nueva adjudicación de los trabajos a otra empresa especializada, para reconstruir el muro afectado sin tocar la conducción eléctrica. Esta reformulación del proyecto ha duplicado el coste de la inversión prevista ya que la obra fue finalmente adjudicada por 265.000 euros. Se espera que este proyecto de reforma del muro de Ana Benítez pueda estar también acabado en el plazo de un mes.

Estos muros afectados por las lluvias del año pasado, y debido al alto coste de su reparación, no pudieron ser rehabilitados antes ya que la Ley de Estabilidad Presupuestaria del Gobierno de España impide a los ayuntamientos endeudarse por encima de un límite fijado por el Ministerio de Hacienda.

Ese límite, aplicado a las cuentas del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, impedía de hecho el poder acometer las obras de reparación con fondos propios, como pretendía el gobierno municipal desde un principio. Sin embargo, y gracias a la disposición adicional VI de la citada Ley, el Gobierno Local ha podido disponer de dinero del superávit municipal para emprender, tras el verano, la tarea de reparación y rehabilitación de los muros afectados por las lluvias