El gobierno tripartito de la capital grancanaria destinará una parte del dinero que sobró de los ejercicios de 2015 y 2016 a cancelar en su totalidad la deuda pendiente con los bancos, que asciende en este momento a 47 millones de euros. Además destinará otros diez millones del superávit del año pasado a inversiones en el municipio y hará frente a obligaciones de pago pendientes. El Ayuntamiento cerró el pasado ejercicio con un beneficio de más de 47 millones de euros, un dinero que, según el alcalde Augusto Hidalgo, no se ha podido gastar debido al techo de gasto impuesto a toda las administraciones locales por el Gobierno de España. La ley de estabilidad impide al municipio utilizar otros 155 millones de remanentes ahora ociosos en los bancos.

"Ya nos gustaría poder utilizar ese dinero para inversiones y poder emplear esos recursos en la generación de empleo, pero el Estado no nos deja", se quejó el regidor, que calificó el "techo de gasto" como un "instrumento terrible" , sobre todo para aquellas ciudades que, como la capital grancanaria, tienen una altísima tasa de paro. La Corporación aprobó, por unanimidad, la pasada semana un acuerdo para pedir al Gobierno de Rajoy que levante esa restricción -el único país que lo aplica en Europa es España - a los ayuntamientos que cumplen.

En 2016, sostuvo Hidalgo, creció el nivel de ejecución del presupuesto en un 11%, con respecto al año anterior, lo que se tradujo en un gasto superior a 30,5 millones más. Aún así, sobraron 47 millones pese a que la ejecución de los ingresos alcanzó el 98%. "Hemos conseguido ejecutar el 100% de lo que nos permite el techo de gasto", pero a partir de ese tope, añadió, el Ayuntamiento no pudo disponer de los ingresos de más que recibió. Eso hizo que el porcentaje de gasto haya sido de un 85,55%. "Si llegamos a superar ese 85,55% de gasto", aseguró, "hubiéramos rebasado el techo de gasto".

Obligaciones pendientes

El Ayuntamiento destinará los 47 millones sobrantes de 2016 y los 25 millones que aún quedan sin gastar del superávit de 2015 a cancelar toda la deuda con los bancos a finales de este año. Así, a los nueve millones para amortizar deuda que hay presupuestados en este ejercicio, se añadirán 25 millones del superávit de 2015 y quedarían unos 13 millones que Hidalgo espera sacar del excedente de 2016, una vez que haga frente a las obligaciones pendientes de pago, cuya cantidad no precisó, y destine 10 millones a inversiones en el municipio, una parte para asfaltado de la ciudad.

El coordinador general de Hacienda, David Gómez, recordó que la Ley de Estabilidad Presupuestaria permite a la ciudad -por haber cumplido todos los requisitos- destinar el dinero sobrante sólo a tres supuestos: inversiones financieramente sostenibles que se puedan sacar a concurso antes de que acabe el ejercicio; hacer frente a obligaciones pendientes de pago y amortización de la deuda pendiente con los bancos. Al igual que se hizo el año pasado con el beneficio de 2015, el Ayuntamiento destinará sólo diez millones de 2016 a inversiones, porque "utilizar una cantidad mayor requiere la autorización del Ministerio y no daría tiempo a licitarlo antes de que concluyera este ejercicio". Gómez recordó que de los 52 millones de superávit de 2015 se destinaron 10 millones a inversiones, más de 17 millones a obligaciones pendientes de pago y quedaron 25 millones que se dirigirán este año a dejar la deuda con los bancos a cero. "Hay un expediente de modificación de crédito en marcha para eso", explicó, "y con el superávit de 2016 haremos lo mismo, tras hacer frente a las obligaciones pendientes. El tripartito tiene previsto aprobar este mes en el pleno la liquidación de 2016 para iniciar la licitación de las obras. "Este año habrá mucha inversión", dijo. Al dinero del superávit se sumará el Fdcan y el proyecto Edusi, entre otros.