El mandato de Jerónimo Saavedra como alcalde de Las Palmas de Gran Canaria enfila su recta final hasta las elecciones del próximo mes de mayo, una convocatoria para la que el regidor esgrimirá como su gran logro la designación de esta ciudad como finalista española para ser Capital Europea de la Cultura en 2016. Ése es el reto, con letras de molde, lograr ser la elegida, una elección que paradójicamente se decidirá dos semanas después de las elecciones, cuando Saavedra ya ejerza el cargo de alcalde en interinidad, quizás para repetir mandato o para traspasar el bastón de mando a otro candidato. En cualquier caso, el veterano político socialista ya ha manifestado en varias ocasiones que la designación como Capital Europea de la Cultura es un premio para la ciudad esté él o no al frente de la Corporación.

El Ayuntamiento no va a escatimar esfuerzos en este objetivo europeo. Para empezar, el menguado Presupuesto General del Ayuntamiento para 2011, aprobado hace unos días en junta de gobierno, incluye una partida extra de 2,3 millones de euros para lanzar y promover la candidatura. Además, se ha creado una sociedad mixta que gestionará los recursos y los actos que se organicen con motivo de la capitalidad, y se ha designado a Juan Cambreleng como director artístico de la candidatura.

A todo ello hay que sumar la designación como Hijo Adoptivo de Mario Vargas Llosa, que ya ha confirmado su asistencia a la capital, un evento que servirá para promocionar la opción tricontinental en Europa. Con este bagaje, Saavedra espera convencer a los cuatro jurados que el 6 de junio visitarán esta capital para realizar una última inspección antes de emitir el veredicto una semana después.

Sin embargo, hay otros retos a los que se enfrenta Saavedra más al pie de la calle, del día a día. Para empezar, cuadrar las cuentas para que el año 2011 acabe sin sobresaltos y los 291 millones presupuestados para todo el año no se acaben antes de tiempo. Ya se oyen voces que hablan de despidos en empresas relacionadas con el Ayuntamiento si continúa la bajada de ingresos, algo que el alcalde no se plantea por ahora.

De cara a la ciudadanía, Saavedra también se marca como objetivo recuperar la bandera azul perdida el verano pasado por la contaminación de la playa registrada en 2009. Es un objetivo al alcance de la mano al no haberse registrado ni un solo incidente en esta playa el pasado año. También parece más cercana la recuperación del viejo Estadio Insular como parque una vez que el Cabildo, su propietario, ha acabado el proyecto de demolición y de primeras obras para empezar este mismo año.

Parque

Menos mediático pero también importante es el Parque de las Creaciones, que se empezará en breve en el viejo cuartel Manuel Lois una vez que el Gobierno canario ha dado autorización para construir en la zona. Este parque está llamado a convertirse en un foco cultural de la capital.

Otro importante objetivo del gobierno municipal antes de las elecciones es lograr la subvención de 12 millones solicitada a la Consejería de Turismo para hacer frente a un lavado de cara integral de la zona del Puerto y hacer más amable la puerta de entrada de los cruceristas a la ciudad. Saavedra ya ha anunciado que, de no lograr la subvención, esta remodelación se pagará con parte de la venta de acciones de Emalsa.

Frente a los retos pendientes también hay que hablar de los que se quedaron en el camino, promesas que se llevó el viento como la plantación de 400.000 árboles, la creación de 200 plazas de policías o construir 4.000 viviendas sociales.