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Astican coloca el cable más pesado del mundo en un barco de tuberías

El astillero reemplaza una bobina de 438 toneladas poseedora de un récord Guinness | El ‘Saipem FDS 2’ zarpará del muelle Reina Sofía en los próximos días

El ‘Saipem Constallation’, a la izquierda, y el ‘Saipem FDS2’, a la derecha, con la bobina nueva y la vieja sobre sus cubiertas. LP/DLP

Es tan largo como todo el muelle Reina Sofía, cuatro kilómetros, y pesa 438 toneladas, suficientes para hacer de él un digno merecedor de un récord Guinness. El cable más pesado del mundo ha protagonizado durante los últimos días una singular operación en el Puerto de Las Palmas, donde acaba de ser instalado por los equipos de Astilleros Canarios (Astican) en un barco dedicado a la colocación de tuberías propiedad de la multinacional italiana Saipem.

Mide cuatro kilómetros y puede usarse en profundidades de 3.000 metros

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Las condiciones del Puerto de Las Palmas decantaron a la compañía, que ya era clienta habitual de Astican con sus buques perforadores, para llevar a cabo esta operación. En el muelle Reina Sofía, donde se encuentra atracado el Saipem FDS 2, los trabajos de bobinado podían llevarse a cabo sin problema por la firmeza de su suelo, necesaria para soportar el peso del cable. 

Los trabajos para la colocación del cable comenzaron, en realidad, antes de llegar al punto de atraque. La coincidencia en el astillero del Constellation, otra unidad de colocación de tuberías de Saipem, permitió depositar sobre su cubierta la nueva bobina usando la misma grúa con la que está equipado el barco, a la espera de que el FDS 2 llegara a Las Palmas de Gran Canaria procedente de Guyana. 

Una vez en la Isla, el buque que iba a recibir el cable se acercó hasta el muelle de armamento de Astican y haciendo uso del posicionamiento dinámico –un sistema que le permite mantenerse fijo en el mismo punto usando sus propios métodos de propulsión sin necesidad de ancla– quedó abarloado al Constellation. La bobina fue trasladada hasta el FDS 2, que se dirigió entonces al Reina Sofía.

Instalación en el buque

Con el barco atracado en su posición definitiva, la bobina regresó a tierra por última vez antes de proceder a su instalación en el cabrestante. A partir de ese momento comenzó la sustitución del anterior cable, que una vez completada su vida útil irá al reciclaje, por el nuevo. El FDS 2 abandonará el puerto de la capital en los próximos días para dirigirse a su próximo contrato. 

Las condiciones del Puerto de Las Palmas resultan idóneas para llevar a cabo estos trabajos

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El equipo instalado en el barco de colocación de tuberías pertenece a un modelo denominado Flexpack diseñado por la empresa Redaelli, que ha logrado distintos récords Guinness con ella. Se trata de un cable de acero concebido específicamente para los trabajos de colocación y recuperación de tuberías en profundidades que pueden llegar hasta los 3.000 metros, y su fabricante ofrece un servicio de monitorización que permite evaluar los cambios que pueden provocar en su estructura los trabajos que le son encomendados.

La operación supone un hito para el sector naval de la capital por el gran peso del cable, aunque la mera presencia en el Puerto de las dos unidades de colocación de tuberías de Saipem es una novedad en La Luz. La compañía ya había recalado en la capital grancanaria con alguno de sus buques perforadores más emblemáticos, como el 12000, pero esta era la primera ocasión en la que confiaba en Astican para este otro tipo de embarcaciones. 

Nuevos rodamientos

Además de servir como apoyo logístico para gestionar la nueva bobina del FDS 2, el Constellation también tiene su propio programa de trabajos en el astillero. De hecho, en Astican se han encargado de reemplazar los rodamientos sobre los que se mueve la misma grúa de 3.000 toneladas y han actualizado el sistema de boyas. Zarpará de La Luz en unas semanas.

El mismo Constellation es un barco de récord. Construido en 2014, la multinacional italiana lo adquirió en 2018 –antes de su compra, ya había estado en Gran Canaria en otras ocasiones con el nombre Lewek Constellation– para reforzar su posición en el mercado de colocación de tuberías, aunque antes de esa fecha ya había participado en trabajos destacados. En 2015, por ejemplo, tendió más de tres kilómetros de tuberías a una profundidad de 2.246 metros con una tensión de 632 toneladas, la máxima registrada hasta entonces en una maniobra de estas características. 

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