La vigésimo segunda edición de Madrid Fusión Alimentos de España llega a su fin con un éxito rotundo de la participación de Gran Canaria. Durante tres días, una veintena de profesionales consolidados y nuevas propuestas gastronómicas y productos locales se han expuesto en el stand que la isla ha tenido en este congreso gastronómico.

«Esta edición hemos podido constatar el cambio y el crecimiento que ha tenido Gran Canaria dentro de esta Feria. Estoy convencido de que estas tres jornadas, nuestro stand ha sido de los más visitados. Creo que nuestros quesos, nuestros vinos, todos nuestros productos kilómetro cero han brillado por sí mismos y de la mano de los magníficos profesionales que tenemos», valoró el consejero de Turismo del Cabildo de Gran Canaria, Carlos Álamo.

Queserías y ganaderos

La tercera jornada puso en valor no solo los quesos de la Isla, sino las queserías y los ganaderos que los hacen posible, de la mano de Isidoro Jiménez, quien contó con la armonía de los vinos Mogarén Orange Salvaje 2022 y Mondalón Rosaro que les propuso la sumiller Patricia Yrisarri (de Vinófilos). «Los quesos de Gran Canaria siempre sorprenden y la gente siempre espera algo de nuestros quesos porque con los años que llevamos viniendo a Madrid Fusión y el movimiento que ha habido en el mundo de los quesos, la gente ya los conoce», apuntó el maestro quesero.

Yrisarri también fue la encargada de hacer la selección del vino Lava blanco de la Isla para el plato lleno de sabor y contrastes, con la calabaza asada como protagonista, que cocinó Alejandro Medero (restaurante Anteo).

Demostración gastronómica de productos grancanarios en Madrid Fusión. | | LP/DLP

Por su parte, el sumiller Esteban García (restaurante Pikza) fue quien armonizó la molleja de cordero pelibuey que elaboraron Marina Tudanca y Alejandro Sosa (restaurante Maraca), con un Ikewen tinto (Bien de Altura). «Creo que es súper importante que el sector esté unido y que podamos intercambiar impresiones sobre los vinos y el trabajo que hace cada uno porque eso nos ayuda a seguir progresando», opinó el co-propietario y sumiller del restaurante Pikza.

Para Marian Tudanca y Alejandro Sosa era la primera vez que asistían como ponentes a Madrid Fusión y les ha parecido, según indicaron, «una experiencia muy positiva y una buena forma de dar a conocer todo lo que se hace en la isla porque hay gente de todo el mundo».

Por otor lado, Víctor Lugo (Finca La Laja) hizo alardes del maravilloso café que se produce en el valle de Agaete, fascinando a los presentes con las particularidades de este producto que llegó a la Isla en la primera mitad del siglo XIX. En estos tres días pasaron también por el stand de Gran Canaria las propuestas gastronómicas de los restaurantes Tabaiba (con una Estrella Michelín y un Sol Repsol), Bevir (una Estrella Guía Michelín y un Sol Repsol), Muxgo (una Estrella Verde Michelín y un Sol Repsol), Nelson (un Sol Repsol), La Aquarela (una Estrella Michelín y dos Soles Repsol), Qué Leche (Recomendado en la Guía Michelín y un Sol Repsol), Casa Romántica (Recomendado en la Guía Michelín), Origen Steak House, Borneo, El Santo y El Caserón del Cortijo, que estuvieron armonizadas por la excelencia de la sala y los vinos propuestos por los sumilleres Nikola Ivicic (La Aquarela), Patricia González (La Cava de Piñero), Airam Ramírez (Bevir), Sara González (La Garnacha de Sara), Chaxiraxi Triana (Canary Wine) y Diego Tornel (Paradisus Gran Canaria by Meliá). Cabe destacar también los productos locales que este año asistieron por primera vez al congreso y que cautivaron a los asistentes: el pulpo, la carne de vaca canaria y el cordero pelibuey. Tampoco faltaron otros asiduos como el gofio, los pescados, los mariscos, las frutas tropicales y la Ruta del Vino de Gran Canaria.

Asistentes en el ‘stand’ de Gran Canaria en Madrid Fusión. | | LP/DLP

De esta manera, Gran Canaria cierra su participación en Madrid Fusión, una edición que donde además de la cocina y los vinos, este año contó con la novedad de una nueva sección: Dreams, un espacio dedicado a imaginar el futuro, de la mano de las infinitas posibilidades que brindan la tecnología, la innovación y el ecosistema foodtech.

Dreams está pensado para ser un espacio de posibilidades para dar luz, desde la cumbre más influyente de la cocina mundial, a las grandes incógnitas que se presentan sobre el futuro de la gastronomía, en el que participaron, a lo largo de tres días, más de 60 expertos de ámbitos muy diferentes.