La Provincia - Diario de Las Palmas

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Sol y sombra

Perplejidades

Días atrás levantó cierta polvareda el hecho de que la primera ministra de Finlandia se dejase ver bailando y bebiendo con amigos en una fiesta privada. Incluso cantando, lo que ha escandalizado a más de un finlandés. Costaba creer cómo el país que teníamos por avanzado y plenamente feliz le negaba a Sanna Marin, su joven gobernante, el derecho a divertirse en sus horas de ocio. La sociedad con mayor igualdad de género del mundo entablaba una gran discusión pública sobre las obligaciones y el comportamiento privado que deben acompañar a un primer ministro, que además se da la circunstancia es mujer.

Curiosamente, las finlandesas fueron las primeras europeas en obtener el voto en 1906; es habitual que la mitad del parlamento finés sea femenino y que Finlandia haya tenido a lo largo de su historia tanto primeros ministros como presidentes hombres y mujeres. En 2011, más del 60 por ciento de las titulaciones universitarias les correspondieron a ellas. Sin embargo, ahora Finlandia le reprochaba a Marin que se divirtiese en una fiesta como haría cualquier otro ser humano. Nada de esto encaja, desde luego, con el supuesto avanzado espíritu finlandés, pero tampoco el Campeonato Mundial de Cargar con la Esposa que tiene lugar cada mes de julio en Sonkajärvi, pequeña localidad del centro del país, donde en un ambiente de feria los hombres cargan a sus espaldas a las mujeres durante una carrera que atrae a competidores de todo mundo.

La vida es un inventario de perplejidades por la propia facilidad del ser humano para asombrarnos. De repente está mal visto que una joven primer ministro baile, cante y beba en compañía de amigos durante una fiesta privada, mientras nos parece de lo más normal que los políticos sean arrogantes y opacos, mientan por costumbre de manera desesperante y roben con frecuencia. Por poner ejemplos a mano, la normalidad la encarnan Boris Johnson, Pedro Sánchez y Cristina Fernández de Kirchner, mientras Sanna Marin suscita el escándalo. Qué cosas.

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