El fundador de la Asociación Mensajeros de la Paz, el padre Ángel García, advirtió ayer que el cólera y la miseria están acabando con Haití, un país que aún no se ha repuesto de los graves daños causados por el terremoto ocurrido hace casi un año. "Los gobiernos extranjeros hicieron muchas promesas, pero no han cumplido ninguna. Lo único que funciona en Haití son las ONG´s", sostuvo el padre Ángel que ha regresado hace sólo unos días de este país antillano.

El presidente de la asociación hizo estas declaraciones ayer tras recibir un cheque de 15.000 euros de la Fundación Universitaria de Las Palmas (FULP) que serán destinados a la creación de una ludoteca para niños en Benin, ubicada en uno de los centros recuperados por Mensajeros de la Paz en este país africano.

"Haití se está muriendo y sus habitantes tienen menos esperanzas que los de Benin. Cuando le preguntaba a la gente cómo iba a celebrar esta Navidad me respondía diciendo que ni siquiera tenía acceso al agua potable. Utilizan la misma agua para limpiar, lavarse y comer", recordó el religioso que animó a los seres humanos, "sean de la religión que sean", a compartir. "Uno es feliz cuando puede hacer algo por lo demás", dijo.

Según el Ministerio de Salud Pública de Haití, el brote de cólera que azota al país desde octubre ha dejado al menos 2.700 muertos y más de 128.250 infectados. Una epidemia que surgió a raíz del terrible terremoto que causó la muerte de unas 300.000 personas y por el que más de un millón se quedó sin hogar. "Se están reconstruyendo algunos edificios, pero lentamente. Lo que sucede en Haití lo tienen que solucionar los gobiernos, no las ONG´s", zanjó.