Los agricultores plataneros de la isla de La Palma han recibido un primer anticipo de 13,5 millones para paliar las pérdidas de producción en las explotaciones afectadas por las más de 225 hectáreas arrasadas por la erupción, las 412 cubiertas por ceniza y las hasta 90 que han quedado en zonas aisladas para el riego. Esta partida ha sido transferida por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a la Comunidad Autónoma de Canarias para compensar el daño ocasionado al principal motor social y económico del Valle de Aridane y de la Isla.
El presidente de la Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias (Asprocan), Domingo Martín, reconoce que «este primer anticipo supone un balón de oxígeno para los cerca de 3.000 productores plataneros que percibirán este pago».
La Consejería de Agricultura del Ejecutivo regional ha determinado que las fincas sepultadas por la lava reciban el 100% del cálculo establecido para las ayudas, mientras que las fincas afectadas por ceniza y las explotaciones con imposibilidad de acceso al riego en Los Llanos de Aridane, Tazacorte y El Paso perciban el 32%, mientras que las de Tijarafe y Fuencaliente cobrarán el 11%.
Sobrecoste y menos ingresos
El cálculo de los importes se realizó en base al rendimiento medio de la zona y a los precios medios de venta. El número de beneficiarios asciende a 2.947 solicitantes, que forman parte de las organizaciones de productores de plátanos de Canarias, que canalizarán la gestión del pago individualizado de la ayuda en apenas unos días, toda vez que son las entidades colaboradoras receptoras del dinero por parte del área autonómica de Agricultura.
Desde Asprocan indican que el sector continúa trabajando con el Gobierno de Canarias para poner en marcha un segundo pago a los productores de la Isla que, por alguna circunstancia administrativa, no hayan podido beneficiarse de este primer anticipo. Asimismo, inciden en que el sector está muy pendiente de una línea de ayudas que queda aún por concretar, también necesaria para el mantenimiento del empleo y la actividad productiva en La Palma.
Se refieren a que la ceniza del volcán ha generado un elevado nivel de sobrecostes de producción que conduce a una inevitable pérdida de ingresos de las organizaciones de productores en la Isla. Ante esta situación, el sector trabajan para evitar el desempleo en la zona, seguir abasteciendo al mercado y continuar una actividad cuya reactivación posterior sería mucho más costosa y difícil.
En esa línea trabajan desde Asprocan, asociación que aborda esta circunstancia tanto con la Consejería de Agricultura como con la Consejería de Economía del Gobierno de Canarias, a cuyos responsables ha trasladado la gravedad de la situación y ha expuesto la urgencia de que se tomen medidas al respecto.
Agricultura abona las primeras ayudas al sector ganadero y pesquero
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias ha realizado el pago del medio millón de euros correspondiente a las primeras ayudas dirigidas al sector ganadero y pesquero afectado por las consecuencias de la erupción volcánica en La Palma.
El departamento autonómico ha iniciado el abono de una ayuda directa valorada en 193.700 euros, destinada a paliar los gastos extraordinarios producidos por la actividad volcánica a 17 ganaderías que se han visto obligadas a desplazarse al encontrarse dentro de la zona de exclusión del volcán.
En relación al sector pesquero, se ha procedido a la entrega de 308.000 euros en ayudas directas a 23 armadores y 22 tripulantes de buques pesqueros con puerto base en Tazacorte, destinadas a compensar las pérdidas económicas sufridas por la prohibición de faenar como consecuencia de la erupción del volcán Tajogaite.
La Dirección General de Pesca del Gobierno de Canarias está a la espera de los informes que emita el Instituto Español de Oceanografía y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para valorar una posible parada biológica, en el caso de existir afección a los recursos marinos. En caso contrario, los barcos saldrían a faenar y se beneficiarían de una compensación si los ingresos que obtengan son menores que el promedio de lo conseguido en años anteriores.
