El dibujante Juan Verona, responsable del Departamento de Ilustración del centro hospitalario grancanario, explica que «somos los pioneros, que ya ha cumplido ya 32 años», afirma, explicando emocionado como, «a los 17 años empecé a ayudar a mi hermana, enfermera, con algunos gráficos y dibujos para sus alumnos en el hospital, razón por la cual, después de su muerte temprana, se le impuso su nombre al Aula de Docencia de este Hospital, Ángeles Verona».

Oficialmente, un ilustrador médico es «un artista profesional con formación especializada y educación en arte, diseño, tecnología visual, técnicas de medios y teorías relacionadas con la comunicación y el aprendizaje relacionados con la gestión médica, la investigación, la medicina y la enfermería; los ilustradores médicos sirven como traductores visuales de información técnica compleja para apoyar la educación, la investigación médica y de ciencias de la vida, la atención al paciente, la educación del paciente, las relaciones públicas y los objetivos de marketing».

La definición de ilustrador médico se completa añadiendo que «como especialista en visualización, crean imágenes que hacen avanzar el conocimiento de las ciencias médicas y potencian la alfabetización en salud para los pacientes y el público. Deben captar información compleja científica, descomponerla y comunicar la historia en una narrativa visual clara que sea precisa, educativa y atractiva».

«Dibujo desde que tengo uso de razón y siempre recuerdo que saqué matrícula de honor en la asignatura de Dibujo, cuando estudiaba Ingeniería Industrial, que, por cierto, nunca terminé», añade. Tras una larga trayectoria en este trabajo, Juan Verona tiene claro que «si no sabes dibujar, no sabes diseñar», aunque matiza que el paso del tiempo «y las nuevas técnicas, me han llevado a ser especialista en la elaboración de Power Point y a trabajar en varios campos que he ido incorporando».

Docencia

El Departamento de Ilustración Médica ha ido ampliando sus funciones y sus aplicaciones prácticas, «atendiendo a las necesidades que ha ido surgiendo durante estos años», explica Juan Verona, «como la incorporación de alumnos de prácticas de la Escuela de Arte, en San Cristóbal, que hacen campañas con ilustraciones que dirigimos desde aquí». El ilustrador médico también destaca la «labor de Enfermería, cuyos profesionales asumen cada día nuevas competencias y también necesitan labores de divulgación»..

Este trabajo diario y continuado está ahora centrado, «en un proceso de humanización del trato que recibe el paciente en el centro hospitalario», cómo comunicar «mayor cercanía y trato más humano a nuestros usuarios para evitar muchos situaciones que hacen más dura de lo que debería, la estancia en este hospital».

Como ejemplo de lo muy rentable que puede llegar a ser una campaña diseñada para la mejora de la información a los pacientes o a cualquier colectivo de los que trabajan en este hospital, «fue un trabajo que hice y que fue premiado en un encuentro de ilustradores en la Península sobre el desarrollo de melanomas y las distintas formas de identificar aquellos que podían terminar siendo lunares sin riesgos y los malignos».

«Dibujé un cuerpo humano y sus diferentes zonas; después se invitaba al paciente a identificar dónde y cómo era el lunar que tenía, apuntaba las fechas de la observación y evolución de los mismos y eso le servía al médico como guía para futuras consultas», explica Verona recordando buenos tiempos.

En el lado opuesto a estos trabajos a mano, el ilustrador pone sobre la mesa una cámara GoPro con un programa de 360º «que estoy estudiando ahora porque se puede aplicar dentro de un quirófano para que los estudiantes o residentes que estén fuera de esa habitación, hagan un seguimiento completo y detallado de todo lo que ocurre dentro», al tiempo que menciona los trabajos con gafas de realidad virtual. «Esto es el futuro y hay que ponerse al día y estudiar mucho para estar a punto para los nuevos procedimientos que serán realidad habitual en muy poco tiempo». No trabaja con nostalgia «porque esto es una pasión diaria de la que disfruto».