Doce centros de Gran Canaria estudian la salud física y mental de su alumnado

El proyecto SESSAMO (Seguimiento de Estudiantes de Secundaria para valorar Salud Mental y Obesidad) busca conocer el efecto que tienen los estilos de vida actuales sobre la salud de jóvenes y adolescentes de entre 14 y 16 años. Esta iniciativa, desarrollada por la Catedrática de Medicina Preventiva y Salud Pública Almudena Sánchez Villegas, cuenta con la colaboración de centros escolares de Navarra y Canarias, concretamente de las islas de El Hierro, La Gomera y Gran Canaria.

Por otro lado, participan investigadores y profesionales de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, de la Universidad Pública de Navarra, de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, del Departamento de Educación de Gobierno de Navarra, de Osakidetza y de los Servicios Canario y Navarro de Salud. SESSAMO está financiado además por el Instituto de Salud Carlos III (Ministerio de Ciencia e Innovación) y por el Fondo Europeo para el Desarrollo Regional (FEDER). 

El curso pasado, fueron 12 los centros de Gran Canaria que se sumaron a esta iniciativa, según datos del Servicio de Innovación de la Dirección General de Ordenación, Innovación y Calidad del Gobierno de Canarias. Los motivos que justifican este estudio es la constatación del paulatino alejamiento que se está produciendo en los jóvenes de los estilos de vida más saludables.

Ejemplo de ello son la pérdida de la dieta mediterránea (sustituida por otra más occidentalizada en la que abunda el consumo de productos ultra procesados), el descenso de la actividad física (debido a modos de vida más sedentarios), el consumo masivo de contenido en las redes sociales o el aumento del consumo de drogas. El objetivo principal de SESSAMO es conocer qué efectos tienen todas estas variables a largo plazo en la salud física y mental de los niños y niñas que ahora cursan 2º, 3º y 4º de la ESO o que tienen entre 14 y 16 años.

Metodología

Para llevar a cabo este estudio de la salud física y mental de los adolescentes canarios, la metodología empleada se basa, sobre todo, en el cuestionario en línea. Tras un primer cuestionario que se realiza de forma presencial a través de ordenadores en el propio centro, la idea es enviar estos formularios de preguntas cada dos años al correo electrónico del alumnado participante.

Por otro lado, estas preguntas sobre hábitos de vida se complementan, si los participantes así lo aprueban, con los datos académicos y médicos de cada alumno y alumna. El seguimiento de los estudiantes se hará hasta que cumplan 25 años, pudiendo decidir abandonar el estudio en cualquier momento. Para participar, al ser menores, tienen que contar con el consentimiento de sus padres.

Otro de los procedimientos voluntarios que permiten obtener datos para este proyecto es la recogida de muestras de material genético. Se realiza a través de un simple procedimiento no invasivo en el que se raspa el paladar. Con todos estos datos, se puede hacer un completo análisis y seguimiento de la salud física y mental del alumnado y, además, también permiten detectar problemas de salud psicológica. Esta información puede beneficiar a los jóvenes de hoy y también a las generaciones futuras que vendrán después y que podrán sacar partido de estos conocimientos. 

"Actualmente, no existe en España ningún estudio de seguimiento en la población infanto-juvenil de este tipo, con lo que, participando en este proyecto, su centro educativo formará parte de la cohorte infanto-juvenil de referencia en España", indicaban desde la Dirección General de Ordenación, Innovación y Calidad canaria en una carta enviada a los diferentes centros educativos de las Islas para promover su adhesión a SESSAMO.

El proyecto se encuentra ahora mismo en pleno desarrollo en el Archipiélago y todavía no hay datos disponibles. La muestra se va a ampliar este año y pronto se podrán obtener resultados más significativos, tal y como han indicado desde la Dirección General de Ordenación, Innovación y Calidad del Gobierno de Canarias.