Tribunales

Confirmada la prisión para el excura que falseó una boda con un muerto por una herencia de medio millón

A David Vargas, expulsado de la Iglesia en 2013, se le vincula también con una estafa a feligresas y la presunta venta de una falsa reliquia

Fachada del Tribunal Supremo.

Fachada del Tribunal Supremo. / Europa Press

Cristina Gallardo

David Vargas, expárroco en Cataluña detenido por estafar a feligresas e investigado por la presunta venta de una reliquia falsa, no ha logrado eludir en el Tribunal Supremosu primera conducta delictiva. El alto tribunal ha confirmado la pena de tres años de prisión que le impuso la Audiencia Provincial de Barcelona por simular una boda entre una octogenaria y su pareja cuando el hombre ya había fallecido, con el objetivo de hurtar a la familia del difunto una herencia de medio millón de euros.

Los hechos ocurrieron en 2008, cinco años antes de que Vargas fuera expulsado del sacerdocio, siendo mosén de la parroquia de Sant Vicen de Castellet (Barcelona). La pareja de octogenarios cuya boda simuló habían mantenido una relación sentimental prolongada y convivieron como pareja de hecho en una vivienda del hombre, que falleció el 11 de noviembre de 2008, sin testamento y sin descendientes directos, solo con dos sobrinos como familiares próximos.

Unos meses después, la mujer -ahora ya fallecida- concertó con el entonces rector de la parroquia una simulación de boda. El cura rellenó entonces los documentos y firmó en nombre del difunto para hacer ver que el enlace se había celebrado en el verano anterior al deceso.

La hija de la simulada esposa -cuya condena a año y medio de prisión también confirma la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo- se encargó de tramitar en el registro civil la inscripción del matrimonio "para que le fueran reconocidos efectos civiles" De hecho, el 30 de abril de ese año la mujer consiguió la herencia. La fiscal retiró el delito de estafa de su acusación durante las sesiones del juicio, y tanto el ahora excura como la mujer fueron absueltos de dicho delito.

Simulación de las firmas

En su resolución, que tiene fecha del pasado 23 de mayo y a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, el Supremo rechaza todos los motivos alegados en los recursos de casación y confirma que lo esencial en este asunto es la simulación de las firmas en los distintos documentos "acreditativos de una celebración matrimonial que no tuvo lugar", cuya finalidad era la obtención por la pareja del fallecido "de unos derechos hereditarios que no le correspondían".

A juicio del alto tribunal, la sentencia cumple con creces el estándar de valoración exigible, ya que, "no sólo ha valorado la totalidad de la prueba, incluidos los testimonios de cargo y descargo, sino que ha exteriorizado con detalle las razones por las que ha dado o no credibilidad a los distintos testigos y, frente a lo que se alega en el motivo de casación, esas razones ni son ilógicas ni arbitrarias".

Entre los testigos figura uno de los policías que intervino en la investigación del caso. Durante el juicio, el agente declaró que comprobaron que no hubo fotos de la boda, ni banquete y que, pese a que la hija les dijo que habían ido de luna de miel a un hotel de Calella, se confirmó que la última visita del fallecido a ese hotel había sido anterior a la supuesta boda. 

Responsabilidad del Obispado

También se declaró la responsabilidad civil subsidiaria del Obispado de Vic frente a la indemnización de 203.900 euros que los condenados deben abonar a los sobrinos del difunto, los verdaderos herederos.

De hecho, durante el juicio un representante de esta institución manifestó que se habían detectado hasta nueve irregularidades en el expediente matrimonial y que al acusado ya en 2011 se le impidió celebrar matrimonios, no por esta causa sino por hechos diferentes.

Vargas, expulsado del sacerdocio en 2013, fue detenido en 2019 por estafar más de 3,5 millones de euros a ancianas feligresas para que le cedieran notarialmente la gestión de sus bienes.

En marzo de 2021 un juez de Barcelona añadió a su lista de posibles delitos un nuevo engaño a la congregación Hijos de la Sagrada Familia, a la que vendió un arca atribuida a Gaudí con cenizas de las vísceras del fundador de la orden que podrían ser falsas, según informó Efe en el momento de la apertura de las diligencias.