Educación

Un último intento para que un niño con TEA asista al viaje de fin de curso: "Es una vez en la vida"

Irene Valerón, apoyada por la Federación de Ampas de Gran Canaria y una resolución del Diputado del Común, insiste que su hijo, matriculado en Aula Enclave, vaya a Madrid el próximo 4 de abril junto al alumnado de Sexto de Primaria

La presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres Galdós, Marian Álvarez, e Irene Valerón durante una rueda de prensa en el CEIP Guiniguada (Las Palmas de Gran Canaria).

La presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres Galdós, Marian Álvarez, e Irene Valerón durante una rueda de prensa en el CEIP Guiniguada (Las Palmas de Gran Canaria). / LP/DLP.

Iván Alejandro Hernández

Iván Alejandro Hernández

A menos de dos semanas del viaje de fin de curso del alumnado de Sexto de Primaria del CEIP El Tablero (Gran Canaria), Irene Valerón persiste en su cruzada para que su hijo Elan Fleitas sea incluido. Apoyada por la Federación de Asociaciones de Padres y Madres (Ampas) Galdós, de Gran Canaria, y por una resolución del Diputado del Común, Valerón remarca la importancia de que el menor, con trastorno del espectro autista (TEA) y escolarizado en Aula Enclave, pueda ir el próximo 4 de abril a Madrid junto a los que considera su grupo de referencia. "Es una vez en la vida. Sus compañeros se irán al instituto y mi hijo se quedará dos años más. Solo pido eso". "No se podría enmendar el daño", añadió Marian Álvarez, presidenta de la Federación Ampas Galdós.

Durante una rueda de prensa celebrada en el CEIP Guiniguada (Las Palmas de Gran Canaria), tanto Valerón como Álvarez aseguraron que, esta vez, acudir a los medios era la última opción, pero sostienen que nos les ha quedado más remedio ante la inminente fecha del viaje y no obtener respuesta a pesar de los requerimientos que dicen haber realizado. "Hay que garantizar que Elan pueda ir al viaje, es su derecho".

Diputado del Común

Para respaldar sus demandas, ambas mostraron la resolución del Diputado del Común, fechada del 5 de marzo, en la que recomienda que Elan Fleitas "pueda asistir al viaje de fin de curso que realizará el alumnado de 6º de Primaria", ya que considera que es "su grupo de socialización", a pesar de estar matriculado en el Aula Enclave. Según la interpretación del defensor del pueblo de la comunidad autónoma, "no hay ningún aspecto legal que impida que un alumno con TEA asista al viaje de fin de curso del colegio, siempre que se cumplan las condiciones y recomendaciones".

En este sentido, la resolución del Diputado del Común agrega que un alumno con TEA "tiene los mismos derechos y deberes que el resto de sus compañeros y compañeras, y no puede ser discriminado ni excluido por su condición”. Y ve "entendible que cualquier madre que quiera que su hijo disfrute del viaje de fin de curso con sus compañeros y compañeras de 6º curso de educación primaria como referente de grupo de iguales".

Desde noviembre

El conflicto entre la familia y el centro se inició en noviembre del año pasado, cuando la madre denunció públicamente que se excluyera a su hijo del viaje de fin de curso. La Consejería de Educación medió entre ambas partes para alcanzar un acuerdo a través de un inspector de zona, pero no llegó a buen puerto. "Después del 15 de noviembre se acaba la comunicación", asevera Valerón.

La última información que le llega, siempre según su versión, es que "habían contactado con el padre de mi hijo el pasado 19 de marzo", para proponerle que fuera él quien acompañase a Elan. "A mí no me importa que vaya su padre, pero que sea una decisión que se tome de manera familiar. Al menos, que me avisen. Estamos separados y yo tengo la custodia".

Valerón incluso ha elevado el caso a los tribunales para solicitar las actas de las reuniones de mediación y de documentación referente a su hijo, pues critican que el centro educativo se había negado a entregárselas. Al respecto, la Consejería de Educación se limita a "respetar ese proceso judicial entre la familia y el centro, a la espera de conocer la resolución".

El perdón

Uno de los principales argumentos del CEIP El Tablero es que la forma de proceder de Valerón ha generado daño y agravio en un centro reconocido por su labor por la inclusión y equidad del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE), especialmente, a su directora y al profesorado. En un comunicado de 18 de noviembre del año pasado, el centro acusaba a la madre de saltarse todos los protocolos y de difundir información inexacta. También defendieron que la madre se había comprometido durante la mediación "a rectificar por las mentiras y disculparse con la directora por difamarla y atentar contra su honor", algo que según la nota, nunca llegó a producirse.

Durante la rueda de prensa, Valerón negó que ella se comprometiera a emitir una disculpa. "Yo no voy a pedir perdón por algo que no he hecho. Nunca voy a faltar a la verdad. No voy a decir una cosa que no sucedió". Al respecto, Álvarez leyó el informe del inspector de zona en el que proponía que para lograr el acuerdo: "En aras de la búsqueda de un entendimiento, la madre se compromete a subsanar la lesión producida en los medios al CEIP El Tablero y a la directora, pero nunca faltando a la verdad de la madre”.

Tras ese encuentro, Valerón envió un audio en el que celebraba que su hijo iba a poder viajar con adaptaciones y defendió que nunca fue su intención "caer encima de nadie". Según contó la madre, "dos minutos después" recibió una llamada del inspector de zona recriminándole que no cumpliera su parte del acuerdo "y que debía pedir perdón". Por todo ello, ambas entienden que se supedita el viaje de su hijo exclusivamente a esa disculpa.

"La administración solo acepta que Elan Fleitas vaya al viaje si su madre pide perdón por unas ofensas que nunca ha emitido. Esa es la conclusión. El inspector de zona sostiene que la madre no ha cumplido porque la madre no se ha hincado de rodillas al equipo directivo del centro. Nosotras sentimos que las negociaciones se rompieron porque Irene no se arrastró", expuso Álvarez.

Sobre este punto, el Diputado del Común ha dicho que "no se puede condicionar el acceso al viaje de fin de curso del menor por las actuaciones procedentes o improcedentes de la madre, tanto a través del centro, de los medios de comunicación como a través de la comisión de conciliación. El menor no es responsable de los actuaciones o declaraciones de la madre, como ciudadana y como responsable de la educación de su hijo".

Estigma

Ante todo lo sucedido, Valerón ha reconocido estar decepcionada con el desarrollo del Aula Enclave porque considera que "ha retrasado su avance" y "ha sido estigmatizado", pues entiende que Elan "podría estar en un aula ordinaria con un acompañante, una técnico o auxiliar que le ayudara a llegar al nivel académico del resto de sus compañeros". En este sentido, recuerda que deseaba que su hijo fuera escolarizado en el CEIP El Tablero, al que ingresó en Infantil de 4 años. Cuando el informe psicopedagógico le recomendó un aula enclave, aceptó porque pensaba que le ayudarían a integrarse en la vida diaria de un centro ordinario.

"Quería que mi hijo fuese al comedor, pero me dijeron que comería en el Aula y le tendrían que dar de comer sus profesoras. Tampoco podía hacer uso de las extraescolares. Hay que pagar a una persona o dejar de trabajar (...). Este año va a solo cuatro sesiones con su aula de referencia porque así lo ha decidido el centro por falta personal. El año pasado, estuvo en siete sesiones a la semana", lamenta Valerón.

Al respecto, también se pronunció el Diputado del Común, defendiendo que las actividades de socialización del alumno se deberían llevar a cabo en los recreos, en el comedor escolar, en las salidas extraescolares y complementarias, además de las que pueda realizar con los cinco o seis compañeros de su grupo de Aula Enclave. "No se le puede impedir realizar a un alumno una actividad de este tipo de no ser por la comisión de hechos graves o muy graves debidamente tipificadas y sancionadas", concluye. 

Una cuestión entre el colegio y la familia

La Consejería de Educación se ha remitido al comunicado emitido el 15 de noviembre, en el que concluía que no se había producido discriminación al menor porque el viaje es una actividad extraescolar planteada para el alumnado de 6º de Primaria, pero Elan está matriculado en el Aula Enclave y "solo realiza algunas actividades" con el alumnado de Sexto.

Además, añade que "el centro había aceptado la petición de la familia de que el niño viajara, pero acompañado por un familiar y limitando su participación a aquellas actividades que no le supusieran ningún agravio por su condición", pero considera que la familia declinó esa posibilidad y la mediación no fructificó. "Una vez constatado por Inspección educativa que el centro ha actuado correctamente y que no ha habido discriminación, como actividad extraescolar y voluntaria del profesorado, es una cuestión entre centro y la familia". Este periódico, a través de la Consejería de Educación, ha intentado ponerse en contacto con el CEIP El Tablero, pero al no tener actividad lectiva por la Semana Santa no ha sido posible.