Agüimes

La Audiencia condena a tres narcos que intentaron introducir dos toneladas de hachís en Gran Canaria

Uno de ellos es penado a tres años y nueve meses de prisión con el agravante de reincidencia, mientras que los otros dos pasarán tres años y medio en la cárcel

Los tres narcos condenados ayer, durante el juicio en su contra en la Audiencia Provincial.

Los tres narcos condenados ayer, durante el juicio en su contra en la Audiencia Provincial. / | lp/dlp

La Audiencia Provincial de Las Palmas ha condenado a tres narcos a penas de entre tres años y medio y tres años y nueve meses de cárcel por intentar introducir dos toneladas de hachís en Gran Canaria. Las defensas llegaron a un acuerdo con la Fiscalía, que rebajó sus peticiones iniciales a la mitad. El juicio se ha celebrado este miércoles y, al mostrar su conformidad todas las partes, se ha dictado sentencia in voce en el mismo acto.

Los hechos que se enjuiciaban sucedieron en octubre de 2021, cuando dos de los condenados fueron sorprendidos por agentes de la Guardia Civil en la playa de Vargas, Agüimes. Descargaban 61 fardos de resina de cannabis (hachís) de una lancha neumática que había transportado la droga hasta la isla. El peso total del cargamento superaba los 2.000 kilogramos. La intención, según Fiscalía, era clara: poner la sustancia estupefaciente a disposición de terceras personas.

Uno de los condenados muestra su conformidad con el acuerdo al que llegó su defensa con Fiscalía

Uno de los condenados muestra su conformidad con el acuerdo al que llegó su defensa con Fiscalía / LP/DLP

El hachís fue cargado en dos vehículos todoterreno que eran propiedad del tercer acusado, y trasladados a una finca -también de su propiedad- en la costa. Los investigadores entendieron que esta persona tenía "idéntico" propósito que los dos anteriores al proporcionar transporte y un lugar en el que ocultar la droga hasta que fuera distribuida y vendida en el mercado. El valor aproximado que podía alcanzar la sustancia intervenida superaba los cuatro millones de euros.

Uno de ellos, reincidente

Una de las personas que descargaba la droga en Vargas, es reincidente. Consta en su historial criminal otra condena por delito de tráfico de drogas dictada por la Sección Sexta de la Audiencia Provincial en enero de 2021, antes de ser sorprendido por la Guardia Civil en la playa de Agüimes. Se le sentenció a tres años de prisión y una multa de seis millones de euros, penas que están pendientes de cumplirse. Los otros dos también tenían antecedentes penales, pero no eran computables para la causa.

El tribunal, presidido por Pilar Parejo (en el centro), durante la celebración del juicio este miércoles, con el fiscal Jorge Pobre a la derecha

El tribunal, presidido por Pilar Parejo (en el centro), durante la celebración del juicio este miércoles, con el fiscal Jorge Pobre a la derecha / LP/DLP

El Ministerio público entiende, en base al acuerdo alcanzado, que estos hechos son constitutivos de un delito contra la salud pública en su modalidad de sustancias que no causan grave daño a la salud, en cantidad de notoria importancia y de extrema gravedad por uso de embarcación. Hechos que se recogen en los artículos 368, 369.1 5ª, 370.3 y 374 del Código Penal vigente.

Además de la pena de prisión, Fiscalía interesó también dos multas para cada uno de los tres acusados por dos millones de euros cada una. Mismo valor que se presupone tendría la droga en el mercado negro. De no abonarse, se sustituiría por penas de 15 días de privación de la libertad por cada una de las que no se paguen.

Indignación

En un principio, el Ministerio fiscal pidió que uno de los condenados, de origen marroquí, fuera expulsado del país al cumplir la pena de prisión. Sin embargo, al final retiró este interés debido al arraigo que tiene esta persona en España.

En la sala de juicio, estuvieron presentes varias familiares de uno de los condenados. Al salir de la vista, una de ellas comentó indignada que su sobrino no era miembro de ninguna organización criminal, como se quería hacer ver, y que podía indicar "dónde hay realmente pisos con drogas que sí pertenecen a una red, pero que la Policía ignora".

Pese a ello, el juicio terminó con una sentencia dictada en ese mismo momento por el tribunal, que la declaró firme después de que las partes confirmaran que no iban a recurrir.

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