Tribunales

Una empresaria dice que perdió dos millones y medio de euros por las gestiones de su socio

El acusado de fraude fiscal admite que realizó transferencias de una empresa a otra, pero asegura que las operaciones estaban registradas y retornaron a su lugar de origen

Una testigo dice que perdió dos millones y medio por las gestiones de su socio

LP/DLP

Benyara Machinea

Benyara Machinea

La apoderada y socia de Domingo V. T., un empresario inmobiliario acusado de defraudar 251.478 euros a la Agencia Tributaria, declaró en juicio que las gestiones inmobiliarias y económicas que llevó a cabo el encausado le reportaron pérdidas de dos millones y medio de euros. El inversor figuraba como administrador único de Lazurita S. L., una empresa que adquiría inmuebles en las Islas por medio de préstamos, que después sufragaba a través de alquileres. En tres años, según su socia, perdieron los 18 locales que explotaban debido a las transferencias que realizó el acusado entre cinco entidades mercantiles.

En la primera sesión del juicio, que arrancó este jueves y se prevé que concluya el viernes, el empresario admitió que realizó movimientos entre las empresas que administraba, pero sostiene que los llevó a cabo siempre con la presencia de un notario y en todos los casos volvieron a su lugar de origen. "Consulté y me dijeron que, como era el socio mayoritario, podía pasar lo que necesitara de una sociedad a otra", afirmó ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas.

La fiscal, Evangelina Ríos, le atribuye la autoría de un delito de fraude fiscal, otro delito societario por relegar a su socia a un 0,5% de participaciones y tres de falsedad documental por emitir documentos de juntas que no se llevaron a cabo. Solicita, al igual que la acusación ejercida por la Hacienda pública, una pena de ocho años de cárcel, una multa de 502.956 euros y una indemnización de 251.478 euros a la Agencia Tributaria. Las acusaciones particulares, que representan a las empresas damnificadas, le atribuyen además otros cargos de apropiación indebida.

"Es absurdo pensar que me llevara dinero cuando era el socio mayoritario", declaró el acusado

Domingo V. T. estuvo fugado durante cinco años, uno de los motivos por los que se ha retrasado la celebración del juicio ante unos hechos que tuvieron lugar a comienzos de los 2000. "El único que ha perdido dinero aquí soy yo, que lo perdí casi todo. Inyecté tanto en las sociedades que me quedé sin nada", alegó durante su intervención.

La versión del acusado es que todas las juntas de socios de Lazurita se realizaron frente a un notario y un abogado, incluidas dos ampliaciones de capital que gestionó para adquirir los inmuebles. El grueso de los locales se encontraba en el Centro Comercial Punta Larga, en Candelaria, donde tenía siete establecimientos, aunque también adquirió otras propiedades en Santa Cruz de Tenerife y en Las Palmas de Gran Canaria.

"Los locales los avalábamos yo y mi mujer. Se llevó a cabo la ampliación de capital con el consentimiento de la que era mi socia en aquel momento y, a los dos años, cuando le pedí el dinero que había abonado, es cuando me demanda", defendió el encausado en su intervención. Tras ser interrogado por la fiscal sobre qué sucedió con los 36.060 euros que aportó inicialmente en la compra de siete locales de Candelaria, respondió: "No recuerdo lo que se hizo, pero es absurdo pensar que me llevara dinero cuando era el socio mayoritario".

Por otra parte, abrió una cuenta en la que figuraban como titulares tres empresas que administraba: Ecotours, Lazurita y Cartoon's Islands. Invirtió 168.283 euros en ella, que después transfirió a la sociedad Dohebo -que tenía como socios a él y a su mujer- y volvió a traspasar a Ecotours. "Fueron destinados a pagar la mercancía de las 20 tiendas de Warner que gestionaba a través de Cartoon's Islands", explicó.

Adelanto de pagos

Con respecto al delito fiscal que se le imputa, por unos ingresos no declarados en Ecotours de 718.534 euros (de los que ya ha abonado un 67%) proveniente de las entidades Mezclas Asfálticas Canarias y Matías Marrero Construcciones y Obras, sostiene que los recibió como un adelanto. "Matías Marrero estaba abriendo un hotel en Maspalomas y aceptó adelantar un pago para que Ecotours llenara los hoteles que tenía", alegó el empresario.

La fiscal, Evangelina Ríos, pide una pena de ocho años de cárcel por cinco delitos

Cuando constituyó la sociedad Lazurita en 1998, lo hizo junto a otro socio con unas participaciones a medias. Más adelante, su compañero vendió su parte en la empresa a otra socia, Miriam G. P., que nombró como apoderada a su madre, Carmen P., porque ella no podía hacerse cargo de las gestiones al residir en Miami. Esta última testificó que el acusado nunca les dijo que era necesaria la ampliación de capital para adquirir los locales y que no fueron convocadas a ninguna junta.

"Mi hija se encontró al venir a España que tenía un 0,5% de participaciones en Lazurita: investigamos y vimos que se perdió más de un millón de euros". Las dos empresarias también tenían participaciones en Cartoon's Islands y en Ecotours y, según Carmen P., el acusado "se llevó", en total, "dos millones y medio de euros". "No eran uno ni dos inmuebles los que perdimos: eran 18", concluyó su hija.