Adiós a un "amante del fútbol base". José Antonio Pérez Marrero el Pirusa (Arucas, 1937) falleció ayer a los 82 años y durante su trayectoria en los banquillos fue integrante del primer cuerpo técnico de filiales de la UD Las Palmas, coordinador de cantera del equipo amarillo y entrenador de fútbol regional de varios equipos de la provincia.

"Si tuviera que definirlo me quedaría con que era un amante del fútbol, pero sobre todo, del fútbol base. Una persona entrañable que se desvivía por la gente joven". Es la descripción que hace Manolo López, director general de Deportes del Gobierno de Canarias y exportero de la UD Las Palmas, donde encontró en el Pirusa a "un confidente". "Era un consejero para los que llegábamos a la cadena. Cualquier duda, él sabía respondértela", comenta.

El amor de Pérez Marrero con el balón llegó en su Arucas natal. Desde joven destacó en una cantera prolífera, donde futbolistas como Granado, Blanco, Justo, José Antonio, Gustavo o Talito dejaron su sello, con la irrupción de Tonono como punto cumbre del fútbol en el pueblo. En esa lista estaba el Pirusa.

En 1977, con la creación de Las Palmas Atlético, Marrero entró en el club para ser mano derecha de José Manuel León, fallecido recientemente. "Con estas pérdidas, unidas a las de Ruiz Caballeros, se han ido en unos meses gran parte de los creadores de la cantera de la UD de hoy", agrega López. Pero más allá de perfeccionar talento y entrenar, había algo que Pérez Marrero tenía muy presente: la formación personal. "Había jugadores que estudiaban Magisterio en Las Palmas Atlético y él propuso que dedicaran parte del tiempo a complementar los estudios de los jugadores infantiles", apunta el exguardameta.

Pasó por otros clubs como San Antonio, Bañaderos o Lanzarote, aunque si hay un sitio donde su trabajo fue sobresaliente ese es su Arucas CF. "Se convirtió en un directivo siempre fiable para cualquier presidente que pasara por el club porque se organizaba muy bien y el trabajo que hacía era espléndido. Era un alma máter de la entidad", recalca López.