Pepe Mel quiere renovar

“Tengo trabajo por hacer, mi obra sigue inacabada. Espero poder terminarla y así seguir juntos muchos años. Estoy feliz y hornado con mi trabajo (...) Viene una camada de enorme talento”, describe el técnico de la UD a sus más allegados. El pasado sábado, tras arrancar un punto de mérito ante el Rayo Vallecano (1-1), dejó caer otra ración de ambición. “Restan catorce jornadas y podemos optar a todo”. Ante el conjunto rayista, Mel hizo debutar al delantero Iñaki Elejalde, una de las promesas de Las Palmas Atlético. Se transformó en el diamante número 23 que toma la alternativa con el novelista al cargo. De Toni Segura al combativo punta del filial.

Con 29 victorias, 28 empates y31 derrotas, la continuidad de Mel ha sido aplazada por los ejecutivos de la UD de forma pública. “Como el año pasado, vamos a ver estos cuatro meses, donde hay mucho trabajo, pero creemos que está haciendo una muy buena labor con un trabajo importante haciendo debutar a gente joven. Está desarrollando una estimable labor. A día de hoy estamos contentos, pero queda mucho y puede pasar de todo”, aseveró Luis Helguera, director deportivo, en su única comparecencia telemática ante los medios, el 2 de febrero.

Ante el Girona, el 19 de marzo, firma 700 partidos de profesional, 90 de ellos de amarillo

En su primer ciclo -temporada 2018-19-, llegó con el reto suicida de colarse en el playoff y solo pudo sumar cuatro victorias en catorce jornadas. Tras el despido de Paco Herrera, la gestión de Ramírez resultó crucial para recuperar a Mel, una vieja pretensión desde julio del 2018 -finalmente se decantaron por Manolo Jiménez-. La UD acabó 12ª y en la siguiente temporada, fue novena. Tras el parón por la pandemia, el novelista rehizo la nave tras el hundimiento en El Molinón (4-0). En el ciclo del poscovid, Las Palmas fue el tercer mejor conjunto de Segunda: cinco victorias, cuatro empates y solo dos derrotas.

En este curso liguero, Mel cumple con el desafío de poner miles de kilómetros de distancia con el infierno del descenso. A falta de 14 fechas -42 puntos en litigio-, los amarillos aventajan en nueve unidades al Sabadell. Lejos de contentarse con la primera exigencia, la UD trata de superar la novena plaza de 2020. En la 13ª plaza, el playoff, que lo marca el Rayo, está a siete puntos (que se elevarían a ocho si sumamos el gol average).

Tras comenzar 2021 como un cohete, superando a RCD Espanyol, CD Leganés y RCD Mallorca -el triplete de titanes-, la UD miró al ático de la competición. El sueño del playoff parecía real. Pero los tentáculos malignos del Covid privaron al técnico de efectivos de gran calibre estratégico como Rober González o el tinerfeño Óscar Clemente. La irregularidad ha sido la nota constante de un plantel que se ha reforzado el pasado enero con Jesé Rodríguez y Mujica.

Generar patrimonio

Las lesiones de Maikel Mesa y el interrogante sobre Enzo Loiodice -pendiente del quirófano-, vuelven a lastrar a Las Palmas. Pero Kirian, se perdió cuatro partidos, vuelve a lucir su clase. Motivos para encarar con optimismo un final repleto de alicientes.

Los ingresos por Pedri -el último pago del Barça eleva a diez millones lo ingresado- y de Mauricio Lemos han disparado el tope salarial de la UD (11,8). Lejos de repetir los errores de la 18-19, desde el consejo de administración se aboga por el ahorro y una ‘política de control’ ante la parálisis de ingresos por el Covid. En este contexto, con un valor del primer equipo sobre los cinco ‘kilos’, se valora el perfil de ‘hombre de club’ de Mel. Jugó un rol clave en la formación de Pedri, con un valor de mercado de 50 millones. Así como en la venta de Josep Martínez -por dos ‘kilos’- al Leipzig.

El ‘Ortolazo’ y el Tenerife

Con un dibujo táctico camaleónico, Mel tiene a tiro el registro histórico de Miguel Muñoz (91 duelos dirigidos), así como el de Sergio Lobera (94). El novelista ocupa la undécima plaza en la tabla de los más lóngevos de Las Palmas. En la relación de los 22 preparadores de LaLiga SmartBank, ya es el más duradero -en su ciclo, el Tenerife acumula siete estrategas-.

Moldeó a Pedri -diez millones de beneficio-, y puede superar a Miguel Muñoz y Lobera

En el expediente, figura la victoria ante el Tenerife en el Gran Canaria con el ‘Ortolazo’ (1-0). Se ponía fin a seis años de sequía sin triunfos ante el eterno rival. Sinibaldi fue el último entrenador de la UD con cuatro campañas seguidas -de 1971 a 1975-. “Mis resultados son discretos, pero he velado por la integridad y supervivencia de la entidad”, aseveró Mel. La entidad recoge dividendos y muere por su vivero. El ecosistema de un veterano que hará 700 duelos ante el Girona (19 de marzo) tras más de 20 años en la silla eléctrica.