Adiós a la pera: estos son los motivos por los que hay que eliminarla

La pera es una fruta dulce, jugosa y refrescante que nace del peral, un árbol del que se han encontrado restos en excavaciones arqueológicas que datan de 3000 años A.C. Originarias de Asia Central y de zonas templadas de Europa, los romanos fueron los encargados no sólo de extender, sino también de mejorar su cultivo. Hoy en día existen diferentes variedades de este fruto rico en agua e hidratos de carbono. No obstante, las más conocidas y cultivadas en España son la Pera de San Juan, Blanquilla, Comice, Conferencia, Limonera, Ercolina y la Pera de Roma.

Según los datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, España es uno de los grandes productores de peras, un fruto que está disponible en el mercado casi todo el año. Presentes en casi todas las cocinas, es uno de los ingredientes más utilizados por su versatilidad, pero también por su sabor y por ser una gran fuente de fibra. Pese a sus bondades, el consumo de peras no está indicado en todos los casos.

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Beneficios de la pera

Las peras tienen un ligero efecto laxante gracias a su alto contenido en fibra, pero también son ricas en minerales como el potasio o vitaminas como la vitamina C. Además, aportan otros nutrientes que son beneficiosos para la salud. Estas son las principales bondades de las peras:

• Alimento diurético: muy recomendada para combatir la retención de líquidos, la pera ayuda a eliminar el agua a través de la orina. También favorece la eliminación del ácido úrico.
• Favorece la pérdida de grasa corporal: su consumo se recomienda en las dietas bajas en calorías debido a que es una fruta baja en contenido calórico.
• Buena para el aparato digestivo: es una fruta de fácil digestión, lo que la convierte en un buen aliado para el aparato digestivo. Además, tiene una pequeña acción astringente y contribuye a evitar los gases.
• Protegen la piel: la piel de la pera está llena de flavonoides, unos compuestos con propiedades antioxidantes que evitan el envejecimiento de las células.

¿Cuándo hay que eliminar el consumo de la pera?

• Aparato digestivo muy delicado: en este caso se recomienda evitar el consumo de la pera cruda, es mejor cocinarla.
• Dietas bajas en FODMAPs: las personas que llevan este tipo de dietas no deben consumir peras, pues están son ricas en fructosa.
• Alergia: los alérgicos a esta fruta o con alergia a la LTP deben eliminar las peras de su dieta. La LTP es una proteína que está presente en la piel de la pera y su consumo en personas alérgicas puede desencadenar reacciones inmunitarias muy fuertes.