Álex Suárez vuelve a su mejor nivel en el lateral derecho

Álex Suárez vuelve a lo grande. No es nuevo que el grancanario rinda a un gran nivel, pues lo ha hecho así desde la temporada pasada, pero ahora ha vuelto a cumplir con creces después de desaparecer de las alineaciones en el mes de diciembre sin motivo alguno más que una simple elección del entrenador. La ausencia de Julián Araujo, primero ante el Barça por la cláusula del miedo y luego frente al Villarreal en el inicio de su sanción de cuatro partidos que le tendrá fuera hasta el fin de semana del 10 y 11 de febrero, le devolvió a la titularidad en el lateral derecho, posición ya rutinaria para él desde que García Pimienta le considerara para tapar los agujeros defensivos el curso pasado. Es poco menos que un seguro de vida.

El capitalino no ha hecho más que progresar en los últimos años y su caché en el mercado ha mejorado gracias a su rendimiento pese a que en marzo cumplirá 31 años, si bien se encuentra en el mejor momento de su carrera deportiva. Su contrato con la UD Las Palmas finaliza el próximo mes de junio, pero las dos partes quieren ampliar el vínculo y confían en llegar a un entendimiento que pasa, sobre todo, por que la entidad amarilla valore al futbolista a nivel económico mejor de lo que lo hace ahora.

Por ahora no hay novedades en ese sentido y la firma no se ha producido, pero las intenciones son las mismas que hace meses. Álex Suárez reúne casi todo lo que el club busca desde hace años: es canario, ha pasado por la cantera, rinde bien, tiene carácter y también alma de capitán. Su peso en el vestuario, carente de líderes de los de antaño –Aythami, Ángel, Valerón o Jonathan Viera–, es muy grande y sus compañeros le tienen en gran consideración.

Ante el Villarreal nunca fue superado por sus rivales: ganó ocho duelos y todas las entradas

Más allá de eso, los registros del jugador en el campo son incuestionables. Frente al Villarreal, por ejemplo, estuvo a la altura del mejor, que fue Kirian, gracias a que nunca fue superado por ningún rival –ni siquiera por Sorloth, que con su cuerpo y su 1,95 de altura lo intentó varias veces en una acción en las postrimerías del encuentro–, tuvo un 100% de acierto en las entradas que hizo y ganó ocho duelos defensivos, según datos de WyScout y Opta. Son sólo números que avalan el buen hacer del hoy lateral derecho.

Porque comenzó la temporada como central, primero con Saúl Coco, en la jornada inaugural, y luego con Mika Mármol hasta que García Pimienta hizo su primera rotación integral de la temporada en el primer encuentro intersemanal, en el Santiago Bernabéu. En el siguiente encuentro, ante el Celta, regresó, pero ese mismo día Araujo se rompió.

Fue entonces cuando el técnico catalán devolvió a Álex Suárez a la posición que le había dado la campaña anterior y el jugador rindió al mismo nivel que por el centro. El mexicano estuvo de baja un partido y en los cuatro siguientes fue suplente: el grancanario se había ganado el puesto. Pero en ese quinto encuentro, en el Benito Villamarín, el futbolista cedido por el Barça mejoró las prestaciones del equipo, que debía atacar más en busca del empate y sentó al capitalino.

Suárez no participó en ninguno de los cuatro partidos ligueros de diciembre salvo en el descuento del choque de San Mamés, donde la UD perdió en el descuento. Ahora el fútbol le ha dado otra oportunidad y, si sigue en esta línea, no saldrá del once.

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