Un coche ha quedado atrapado en mitad de un río por el abundante caudal debido a las lluvias de los últimos días en Sucre, Bolivia. El vehículo pertenece a un capitán del Ejército boliviano que vio sorprendido por la riada. Un cadete y un soldado no se lo piensan y se tiran al agua para intentar ponerlo a salvo.En un primer momento el cadete parace que consigue cogerlo y lo arrastra a contracorriente hasta donde está su compañero, pero se le resbala y, en un segundo intento, parece que lo remolcan de nuevo. Pero la corriente cada vez es más fuerte y se han quedado atrapados en un remolino.Finalmente sus fuerzas flaquean y son arrastrados río abajo. Sus cuerpos fueron rescatados a 15 kilómetros de distancia, cerca de la población de Yotala. Ahora el Ejército investiga las causas de lo sucedido.