Esta mañana la oposición ha atacado al Gobierno en la sesión de control con toda una batería de preguntas sobre la reforma laboral. La izquierda ha calentado la huelga en el interior del Congreso con pancartas en los escaños y reparto de panfletos en los pasillos. El ministro de Hacienda no ha querido informarse. Pero sí el de Economía. De Guindos no se cierra a los argumentos del contrario. Aunque en el hemiciclo han acusado al Gobierno de lo contrario. La mayoría de los parlamentarios socialistas acudirá mañana al Congreso la motivació de "rechazar una malísima reforma laboral". Algunos diputados se ausentarán o donarán su jornal en solidaridad con los huelguistas.