En Barcelona, los indignados ha decidido alargar un día más la acampada, aunque no en la plaza Cataluña. El Ayuntamiento sólo les había dado permiso hasta la medianoche de ayer y a esa hora abandonaron la plaza; pero han decidido continuar con su protesta frente a la sede de la Caixa. Allí hay prevista una cacerolada a las 8 de la mañana.