La Policía delimita los accesos al Congreso y la bandera ya ondea a media asta en recuerdo de Adolfo Suárez. Ha sido el mismo presidente de la cámara, Jesús Posada, quién ha anunciado que la familia ha aceptado su petición de instalar la capilla ardiente del expresidente en el Congreso, el lugar donde Suárez “encauzó la democracia”.