La pesca de la vieja con caña dejará de practicarse en Canarias, tal y como se ha hecho de toda la vida. En el anteproyecto de la Ley de Pesca en Canaria se recoge que no podrá capturarse ningún tipo de crustáceo, entre ellos el cangrejo manso, jaca o bullón como se conoce a la carnada de vieja, término que recoge el mismo Gobierno de Canarias cuando habla de esta especie. Sólo se dejarán que se cojan cinco cangrejos araña para la pesca de la vieja cuya captura representa una gran dificultad, puede resultar hasta peligrosa y no existe en todas las islas del Archipiélago.

La vieja se puede pescar con otro tipo de carnadas de casualidad. Raro es que un pescador que ponga en el anzuelo gamba o pan, por ejemplo, pegue una durante una jornada de pesca. Lo normal es usar la jaca y con unos aparejos que hacen de esta modalidad toda una tradición. En Fuerteventura muchos son los que emplean esas largas cañas, de bambú o de barranco, con un cuerno de cabra especialmente preparado en la puntera para sentir su picada.

Se usa un nailon grueso, inapropiado para otro tipo de pesca, y un gran anzuelo porque la vieja come de arriba abajo y cuando lo hace su embestida, si es superior a un kilo, es de tal fuerza que requiere aparejos adecuados.

También hay quien la pesca con otros métodos, pero siempre con este particular cangrejo, que ahora se quiere proteger con esta medida que en principio parece que afectará a nadie más que a los pescadores de recreo, pero que también involucra a los profesionales, ya que dentro del apartado del marisqueo uno de los puntos es que no se podrán remover las piedras. ¿Entonces cómo se van a coger las jacas? se preguntan incrédulas las pocas personas que han tenido acceso a este anteproyecto.

Así las cosas, quien quiera comerse una vieja o se dedica a la pesca submarina o va a la pescadería o a un restaurante para poder degustar uno de los platos más apreciados de la cocina canaria, siempre y cuando no se quiera incurrir en una infracción de las que se recogen en este borrador o convertirse en un pescador furtivo.