El turismo en Canarias se recupera, pero modestamente. Las Islas cerrarán el año con cerca de 8,46 millones de turistas extranjeros, lo que situará al sector aún en niveles equiparables a hace 13 años. Pese a que la ocupación mejora en un 3% este año, los empresarios han tenido que jugar con ofertas y rebajas de precios, lo que repercutirá en la tercera caída consecutiva de los ingresos. El presidente Paulino Rivero anunció ayer que el Ejecutivo ultima acuerdos con media docena de compañías encaminados a poner en marcha el plan de captación de un millón de turistas más. El objetivo fijado: superar los nueve millones de turistas durante el próximo año.

Esos acuerdos se centran en el establecimiento de más de 120 vuelos semanales entre destinos actuales y otros nuevos y emergentes. El objetivo de este plan, subrayó el Gobierno canario, no es incrementar el número de camas, sino el número de turistas. "Sin plazas aéreas disponibles no podremos elevar la ocupación", aseguró ayer Melchor Camón, gerente de la empresa pública de Promoción Exterior (Proexca). Este departamento, de hecho, ha negociado ya con Iberia, Air Berlin, Iberworld, Ryanair, Spanair y Air Europa para reforzar las líneas con Canarias. Incluso, Ryanair ha reservado ya 500.000 plazas hacia las Islas para este invierno, según apunta el gerente de Proexca.

Canarias alcanzó un máximo histórico de 10,1 millones de extranjeros en el año 2001. Desde entonces, el sector se ha mantenido estable en los nueve millones de visitantes, hasta que la crisis golpeó con su mayor incidencia en 2009 con un registro de entradas de apenas 7,98 millones de personas. Ahora, un año después, los hoteleros comienzan a vislumbrar una salida, y la evolución actual augura que se cerrará este ejercicio con una subida próxima al 6%.