Hasta tres horas atrapados a la salida de Santa María de Guía o una hora y cuarto de espera en el cruce del Hormiguero. Los vecinos de Agaete, Gáldar y Guía vivieron ayer miércoles el peor día de atasco desde que se redujeron los carriles por las obras de ampliación de la carretera del Norte de Gran Canaria entre la Granja y Pagador. El colapso se produjo por el cierre de un tramo en la zona de Pagador, en el municipio de Moya.

Según denunciaron vecinos afectados, desde el pasado martes se cerró un carril en la zona de San Andrés y con el corte de ayer en Pagador, se propició el gran atasco, con la vía totalmente colapsada hasta la entrada de Santa María de Guía durante las primeras horas de la mañana. "Sin avisar y sin nadie trabajando en la obra". Así definía la situación Juana González, de Gáldar. Ella muestra la indignación que muchos ciudadanos del Norte sienten ante lo que consideran como una nefasta planificación viaria. No sólo se colapsó la autovía, sino carreteras secundarias como la Cuesta de Silva, que está siendo utilizada por muchos conductores para evitar las retenciones.

Desde el viernes, Las obras de acondicionamiento de la carretera del Norte han logrado que llegar a Las Palmas de Gran Canaria sea un auténtico calvario para los vecinos de la comarca, por lo que el enfado vecinal es palpable en la zona.

Los ánimos ciudadanos en el norte de la isla están bastante soliviantados y los responsables políticos de la comarca no salen muy bien parados. Muchos consideran que en la Mancomunidad prevalecen los intereses de los partidos políticos antes que el interés general.

También se sienten agraviados con respecto al Sur, ya que están convencidos de que para esa zona se toman medidas, y en el Norte todo se hace sin tener en cuenta el perjuicio para los vecinos que llevan más de 20 años de espera por la carretera.