Durante el mes en que las actuaciones han estado secretas, el magistrado instructor ha continuado tomando declaración a posibles víctimas. Muchas han vuelto a testificar que mantuvieron relaciones sexuales con Fernando Torres Baena y el resto de imputados en la causa, entre ellos su pareja, María José González Peña, y la karateca Ivonne González Herrera. "Mantuve relaciones con Fernando porque me comió el coco", declaró en marzo una de las víctimas. Ahora es mayor de edad, pero se inició en la escuela de kárate con 10 años y poco después sufrió los primeros supuestos abusos.

"Me daba charlas para meterme en la cabeza que el sexo era bueno. También me acosté dos veces con Ivonne", atestiguó el mismo afectado.

El resto de declaraciones es similar. "María José me enseñó a masturbarme. Primero con las manos y después con un consolador", relata una chica que entonces tenía 14 años.

En comisaría habrán declarado durante estos últimos tres meses unas 100 víctimas, pero ante el juez han comparecido menos, entre 70 y 80, pues muchos de los hechos denunciados han prescrito.

También hay alumnos de la escuela que han negado haber sufrido o presenciado los abusos sexuales investigados, aunque el número es reducido.