La subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI o Contribución) cobrada por primera vez el año pasado a los ciudadanos de la capital supuso para el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ingresar unos 13,5 millones de euros más que en 2009 pese a la incidencia de la crisis económica. Según destacó ayer el director de gobierno de Presidencia, Sebastián Franquis, los ciudadanos han respondido "responsablemente" al impuestazo aplicado al recibo de la Contribución del año pasado y que pagaron de forma voluntaria el 83,42% de los vecinos, sólo medio punto menos que en el 2009, cuando aún no se habían subido las tasas.

Con los porcentajes ofrecidos ayer por Franquis, se desprende que el Ayuntamiento ha recaudado una cantidad cercana a los 54,8 millones de euros sólo por el IBI, ya que el 100 por 100 previsto en los presupuestos de 2010 calculaban una recaudación neta de 65,6 millones. Esta recaudación supone cerca de 13,5 millones más que en 2009 cuando, según el director de gobierno, se ingresó de forma voluntaria el 83,94% del total presupuestado para todo 2009. Ese total ascendía 49,4 millones de euros por lo que la recaudación voluntaria de 2009 se cerró finalmente en 41,4 millones.

El impuestazo del IBI supuso un incremento en los recibos del pasado año de entre 26 y 250 euros, aunque la media se situó en los 45-50 euros de más en cada vivienda. Franquis mostró ayer su "agradecimiento" a los vecinos de la capital por la mínima bajada experimentada en la recaudación del año pasado pese a la subida. "Se han mantenido los mismos niveles de recaudación que en 2009 y es algo que hay que destacar por el sacrificio que ha supuesto para muchos ciudadanos el esfuerzo fiscal solicitado", dijo.

El director de gobierno destacó también las facilidades ofrecidas por el Ayuntamiento a la hora de pagar la Contribución como uno de los motivos para que la recaudación se mantuviera en niveles similares a la de otros años. En este sentido, el servicio municipal de Tributos permitió en 2010 fraccionar en tres pagos el abono del IBI para aquellos contribuyentes que lo pidieran con la suficiente antelación (el periodo voluntario de pago comenzó la segunda semana de septiembre). También se incluyó para la campaña fiscal de 2010 la posibilidad del pago aplazado de la Contribución a partir del mes de abril y hasta diciembre con recibos mensuales, aunque para ello había que domiciliar el recibo.

También se ofreció a los vecinos con menos recursos la devolución de la subida de la Contribución, una medida de la que se iban a beneficiar 80.000 contribuyentes y que finalmente sólo disfrutarán unos 31.000 al rebajar el Consistorio de 1,5 millones a 600.000 euros la subvención destinada a este fin.