"Yo creo que es bueno recuperar el Guiniguada para la ciudad", señaló el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ante la posibilidad de poder devolver a la ciudadanía este espacio. Una idea que, como señaló el mandatario insular, "resurge cada cierto tiempo" y que, en esta ocasión, cuenta con tres alternativas para llevarse a cabo. Entre ellas se encuentra la del Ayuntamiento capitalino, que pretende semipeatonalizar la zona, mientras que las de los arquitectos Joan Busquets y José Antonio Sosa apuestan por volver a destapar el cauce. La de este último, precisamente, está abanderada por el Gabinete Literario y cuenta con el apoyo de otras 13 entidades.
Morales aseveró estar "encantado de que se genere debate" sobre un tema que permite echar una mirada hacia los tiempos actuales. "No vale todo. No vale generar economía a base de implementar más cemento y más cemento. La protección del paisaje y de los valores de un territorio son muy importantes". Es por ello que, según apuntó, la institución que dirige también se va a sumar a ese debate que trasladarán "a los planeamientos que sean necesarios", al considerar "importante que desde las administraciones públicas se haga una reflexión sobre la posibilidad de reconducir ciertas políticas que han hipotecado el desarrollo de espacios que, sin duda, pueden ser una parte importante del pulmón de una zona de esparcimiento de la ciudad".
En este sentido, el presidente garantizó que el Cabildo insular "no va a rehuir el compromiso con Gran Canaria" en lo que a búsqueda de alternativas se refiere. "No obstante, todavía no sabemos de qué estamos hablando ni la dimensión presupuestaria que podría tener esta intervención", apostilló con cautela ante la falta de datos económicos y técnicos que todavía hay sobre el asunto. Y es que la recuperación del del barranco aún tiene que vencer su principal escollo: la calificación que tiene la GC- 110 como vía de interés regional.
Una declaración ante la que Pablo Rodríguez, vicepresidente del Gobierno de Canarias (órgano al que pertenece la titularidad de la carretera), ha anunciado que será estudiada para ver las posibilidades que existen de transformar la autovía a su paso por Vegueta y Triana. Si bien habrá que esperar a que los cambios sean avalados por informes técnicos y jurídicos que certifiquen que estos no provocarán grandes problemas de tráfico, al tratarse de una vía de enlace entre la capital y otros núcleos importantes como Tafira, la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria o Santa Brígida.
Ya en 2016 un informe determinó que este tramo de autovía tenía que mantener la misma categoría, aunque se podía realizar alguna transformación. Este dictamen tuvo lugar después de que el Ayuntamiento realizase una petición a la Consejería de Obras Públicas regional para intervenir en la GC- 110 que, tal y como explicó Rodríguez, no puede ser cerrada al tráfico al tratarse de una vía de evacuación de la capital dentro de la red de carreteras de interés regional. A pesar de ello, desde el Ejecutivo regional no cierran las puertas a que el tramo de la carretera que transcurre entre Triana y Vegueta se municipalice, así como tampoco lo hace a que se puedan desarrollar alternativas para que ambos barrios vuelvan a estar unidos.
Por lo pronto, son tres las opciones que se barajan para recuperar el cauce del Guiniguada. Por un lado, está el proyecto del Consistorio capitalino que pretende semipeatonalizar la vía. Para ello, desde la Concejalía de Urbanismo que dirige Javier Doreste se planea la ampliación de las aceras, una mayor presencia de arbolado, así como la creación de carriles bici y aparcamientos regulados para que el peatón gane protagonismo frente al coche privado.
Otra de las propuestas, la más antigua, es la del arquitecto catalán Joan Busquets, quien propuso en 2005 destapar el barranco en desde la calle Obispo Codina hasta su desembocadura, donde se crearía una plaza con una gran laguna, además de soterrar la Avenida Marítima para crear un paseo que discurriría en paralelo entre Vegueta y Triana. Una idea que empezó a ejecutarse bajo el mandato de Pepa Luzardo (PP) y que finalmente quedó paralizada por su elevado coste.
Por último, el también arquitecto José Antonio Sosa plantea como alternativa quitar el hormigón y dejar parte de las bóvedas a modo de puente en tres puntos distintos del citado tramo. Una iniciativa que, además del Gabinete Literario, cuenta con el respaldo de otras 13 entidades que han firmado la carta de apoyo al proyecto Quitar la losa al Guiniguada. Entre ellas se encuentran la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Gran Canaria, Amigos Canarios de la Ópera, Real Club Náutico de Gran Canaria, Real Club de Golf de Las Palmas, Real Club Victoria, el Diputado del Común, el Museo Néstor, el Hospitales San Roque, el Consejo de Gobierno de la ULPGC, Adapa Canarias, Amigos Canarios de la Zarzuela, el Centro de Iniciativas y Turismo y la Real Academia Canarias de Bellas Artes de San Miguel Arcángel.
