Convertida en una de las empresas de referencia en las artes escénicas en Canarias, Clapso Producciones celebra sus 25 años de vida apostando por crear cultura en el Archipiélago y, sobre todo, presumiendo de haber podido cumplir el sueño creativo que desde muy joven pululaba en la cabeza de Israel Reyes, fundador de la productora.
Con casi una treintena de producciones teatrales a sus espaldas durante los últimos 25 años, además de la organización de eventos (públicos y privados) o la dirección y producción de algunos de los carnavales más importantes de Canarias -desde hace más de diez años los de Las Palmas de Gran Canaria y en varias ocasiones el Carnaval Internacional de Maspalomas-, Clapso Producciones llega a este aniversario con el despegue internacional de la empresa, que desarrolla proyectos actualmente en China y Estados Unidos, además de consolidarse en el panorama cultural de Canarias, refrendada por el éxito de sus tres últimos proyectos: La Bella Durmiente, el musical; Sin Sombra de Grey y Los secretos de la vagina. Asimismo, la productora estrena el 16 de diciembre en el Teatro Guiniguada de la capital grancanaria La vida en tetrabrik, un espectáculo protagonizado por la actriz Leo Medina con texto y dirección del propio Reyes; para 2017 Clapso trabaja en nuevos proyectos que ya tienen nombre, elenco, escenario... Y es que la maquinaria que Israel Reyes alberga en su cabeza no deja de funcionar ni un segundo en un claro ejemplo de la pasión que este grancanario imprime a su trabajo y, también, a la vida. A la suya y a la de aquellos que le rodean. Generoso en el trabajo, habla siempre maravillas de -casi todos- las decenas de actores, cantantes, actrices, músicos, diseñadores y un largo etcétera de profesionales que ha dirigido o con quienes ha colaborado. Es más, entre sus amistades figuran directores y productores canarios que, lejos de ser competencia, se han convertido en camaradas. Legal y con una imaginación arrolladora, a sus 45 años Reyes vive un gran momento profesional y para celebrarlo qué mejor que rodearse de algunos de los actores y actrices a quienes ha dirigido en estos 25 años.
"Si los hubiéramos convocado a todos se hubiera hecho la foto en un Pabellón Deportivo", lamentaba estos días Reyes cuando echaba en falta a una u otro en la sesión de fotos, organizada por Con Estilo, en otro gesto de Israel Reyes que retrata el espíritu bondadoso de aquel niño del barrio de Schamann que un día decidió que la historia de su vida y, de paso, la de quienes le rodean y la de aquellos que ocupan las butacas de los teatros, la escribiría sólo él.
