Segundo intento. Después de que el Juzgado de Instrucción número 3 de Las Palmas de Gran Canaria diera carpetazo el 27 de marzo de 2009 a una querella del inspector de Policía José Ángel Vargas Tolosa (archivo recurrido ante la Audiencia Provincial y pendiente de resolución) en la que se denunciaba la existencia de una trama policial destinada a perseguir a miembros del Partido Popular en Canarias a través de las investigaciones del caso Góndola (Mogán) y caso Faycán (Telde), ahora se ha presentado otra muy similar en los juzgados de San Bartolomé de Tirajana, en la que se ponen de manifiesto hechos prácticamente idénticos a los que el juez Tomás Martín ya archivó.

Según dicha querella, presentada a finales del pasado mes de enero, determinados miembros adscritos a la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional "dieron versiones muy distintas en los juzgados de Telde y San Bartolomé de Tirajana buscando evidentemente inculpar a terceros de sus propias acciones delictivas en relación con las filtraciones que, mediando un más que claro interés político, realizaron en los casos Faycán en Telde y Góndola en San Bartolomé de Tirajana", recoge el escrito, que además asegura que se trataba de "una campaña evidente de persecución, acoso y derribo de quienes eran el enemigo político: El Partido Popular".

La querella pide la imputación de tres cargos policiales, el inspector jefe Abel Pérez Gomara (jefe de la Brigada Provincial de Información en aquel entonces), José Antonio Ayuso Delgado (jefe de grupo de dicha Brigada) y Juan Murillo Murillo (también jefe de grupo de la misma unidad). El cuarto de los querellados es el periodista Alexis González, del portal digital CanariasAhora, al que el inspector Vargas acusa de ser el destinatario de un sinfín de filtraciones interesadas por parte de los mandos policiales citados.

De los tres policías querellados, dos ya lo fueron en la denuncia presentada ante los juzgados de Las Palmas de Gran Canaria (Abel Pérez y Juan Murillo), querella que en realidad fue presentada por otro inspector de Policía, Francisco Santana Santana, y en la cual se personó diez días más tarde como acusación particular el inspector Vargas.

Concepción de Vega

Uno de los detalles más curiosos de esta segunda denuncia es la desaparición de Concepción de Vega de los presuntos hechos delictivos. La que fuera jefa de la Brigada de Información y posteriormente jefa superior de Policía era considerada como una de las piezas importantes de la supuesta trama en la primera denuncia y, ahora, su nombre no aparece asociado a delito alguno a lo largo de los 46 folios de esta segunda querella.

José Ángel Vargas imputa a los cuatro querellados los delitos de prevaricación, acusación y denuncia falsa, falsificación de documento público, revelación de secretos, violación del secreto de correspondencia postal y omisión del deber de perseguir delitos.