‘Maquipelu’ a pie de carroza en el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria

Miles de carnavaleros abarrotan las calles de Las Palmas de Gran Canaria para disfrutar de la gran cabalgata

Un total de 120 carrozas participan en el evento

Desde Venecia hasta Brasil pasando por Cádiz y Santa Cruz de Tenerife. Todos estos carnavales se dieron cita hoy en una única ciudad, Las Palmas de Gran Canaria, que celebró su gran cabalgata en honor a los Carnavales del Mundo. Sobre –con media hora de retraso– las cuatro de la tarde, las 120 carrozas que participaron en esta edición pusieron rumbo al parque de San Telmo desde La Isleta, una fiesta que echó a la calle a miles de carnavaleros con ganas de baile y enrale. Eso sí, antes de salir, lo primero es peinarse, además de ponerse el disfraz y la purpurina, ¿no?

La respuesta, por sorprendente que parezca, es que no, y si no que se lo digan a la peluquería low cost improvisada que hoy había montada a pie de carroza. En plena calle Juan Rejón, entre las familias y grupos que estaban con sus sillas aguardando la llegada de la comitiva, había un tumulto de señoras con rulos que destacaban sobre el resto. Todas ellas esperaban turno para que la peluquera diera a sus obras de arte capilares el último retoque.

En la mano llevaban la revista Pronto, para amenizar la espera, y un vaso de té opaco, por lo que habrá que creer que en el interior había té, aunque la bebida no parecía que las calmase, al contrario, estaban arrebatadas al son de la música del desfile, que abrieron los Nietos de Kika y la reina del Carnaval, Katia Gutiérrez. Una de las clientas que había tenido suerte era Sonia, vecina de la zona, que cogió sitio nada más llegar al establecimiento, que no era más que cuatro sillas plegables. «En realidad ya acabé hace tiempo, pero le estoy guardando el sitio a una amiga que viene de camino. Es muy barata, hay que aprovechar», contó susurrando la mujer para que el resto no la escuchara.

Era tan barata esta franquicia, con autorización de apertura de dudosa procedencia, que no se pudo resistir ni el grupo musical Ladilla Rusa, que también apareció en busca de un cambio de look. Si bien Wikipedia recalca que son de Barcelona, hoy desmintieron tajantemente esa afirmación. «Somos de La Isleta», aseguró Tania Lozano, una de las integrantes del famoso duo. Entre sus éxitos se encuentra la canción Macaulay Culkin, que relata la historia de Solo en Casa, película protagonizada por este actor norteamericano. Por eso llevaban enmarcado un cartel con el póster del filme.

Calor en las partes nobles

Con la chapa y pintura a punto, toca sacar el billete y dirigirse a la puerta de embarque. «Última llamada para los pasajeros con destino Carnaval», se escuchaba desde los altavoces de la carroza de Karna Airlines. Antes de despegar, las azafatas dieron instrucciones para actuar en caso de emergencia a los presentes, así como los protocolos de actuación en caso de necesidades fisiológicas. «Está prohibido hacer popó en el avión. Hay que venir cagao de casa», advirtió una de las mujeres. «Y en caso de golpe de calor en las partes nobles, usen gomita, que si no hay peligro de que acabé en chiquillo, y no podrán venirse en el vuelo de los carnavales del año que viene», añadió.

Bien lo sabe Deisy, la famosa pata de Disney, que hoy andaba angustiada al borde de la lágrima en busca de su marido, el pato Donald. «Se fue a por tabaco y no volvió más. Por favor, si lo ves dile que vuelva, que estoy embarazada», suplicaba a los carnavaleros la pobre.

Para viajar en esta gran cabalgata, aparte de a pie o en avión, también estaba la opción del cohete. ¿El comandante? El pequeño astronauta Álvaro, que acudió acompañado de sus padres, Naila y Andrés. «Él lleva la fiesta en las venas, lo traía en la barriga cuando no había ni nacido», subrayó su madre. Su nave, una vez llegue el final del recorrido, tendrá como parada final el planeta Júpiter, el favorito del niño.

En un evento que congrega a tantas personas, incluido a la muñeca Barbie carnales edition, es indispensable contar con los profesionales de emergencias, que deben velar porque todo salga bien, o al menos decente. «La cosa está prendía, vamos a tener que apagar muchos fuegos», explicó uno de los bomberos carnavaleros. En el camión decían que llevaban mangueras y extintores, pero por la forma de carrito de la compra del vehículo quizás la carga era otra cosa.