Lleno, como no lo había estado las veladas anteriores, el parque de Santa Catalina vibró al ritmo de las últimas murgas que salieron el pasado miércoles. Un ambiente especialmente fiestero invadió la tercera fase del concurso que cerraron los más veteranos. Bajo la dirección de Tito Rosales, Los Chancletas fueron los encargados de poner el punto y final más colorido al certamen. Pero antes, Despistadas y Trotamúsicos desfilaron por el escenario de Las mil y una noches para llenarlo de humor e ironía.
Desde La Isleta, llegó Despistadas, dirigidas por Anabel Trujillo Reyes. Antes de empezar con su actuación, ya habían captado todas las miradas, pues su fantasía, Tus deseos serán concedidos, era, sencillamente, espectacular. Antepenúltimas del concurso y de la noche, las 40 componentes de la agrupación fueron las últimas representantes femeninas en intentar abrirse camino hacia la final. Así lo reivindicaron en su primer tema en el que se transformaron en auténticos "machos" a los que no les faltaba pelos en la tan de moda barba. "Yo soy un hombre, un tío fuerte y sin dudar" o "soy más chulo que Rafa Mora y Cardona a la vez" fueron algunas de sus manifestaciones masculinas que, además, acompañaron con gestos también muy de "machos". Con esta canción, las murgueras reclamaron igualdad, en todos los ámbitos de la vida, para hombres y mujeres. Muy divertido fue también el momento en el que se pusieron manos a la obra para buscar un nuevo novio después de encontrar al que tenían "ligando por Facebook con otra". Todo un drama que las chicas intentaron solventar, según narraron, saliendo, entre otros, con un compañero de trabajo que quedó descartado por "depilarse hasta el culo". Eso sí, en todo momento tuvieron claro que con un chicharrero no estaban dispuestas ni a intentarlo. Finalmente, Despistadas se quedó con el amor de su vida, que no es otro que el Carnaval.
El concurso de murgas ha estado marcado por la originalidad y la creatividad de cada una de ellas. Pero, sin duda, la mayor diferencia la han marcado esta edición Los Trotamúsicos, quienes quisieron recuperar la esencia murguera de antaño en su puesta en escena. Con un mismo ritmo a lo largo de una única canción, los de Zárate interpretaron su Pasodoble Tradicional, en homenaje a los predecesores que "son el caldo de cultivo" de las carnestolendas. Salieron a la palestra políticos de todos los colores, "ladrones que no llevan capucha ni pistola", así como aludieron a Miguel Ángel Ramírez (varias murgas lo sacaron a colación durante la noche) a quien a causaron de que "por ahorrarse cuatro perras no contrató suficiente seguridad" y, por ende, no se pudo evitar que entraran en el campo los que impidieron el ascenso de la UD.
Aunque les costó un poco y pararon varias veces la canción para intentar hacer partícipe al público, Los Trotamúsicos finalmente lo lograron. Los murgueros consiguieron que la gente levantase sus sillas y, finalmente, terminase bailando en su despedida. Y es que ayer el parque estaba especialmente animado. Los presentes se dejaron el cariño y la voz con cada uno de los grupos. Entre ellos también se encontraban representantes y miembros de otras murgas que, expectantes, esperaban el dictamen del jurado -que llegó de madrugada-. Bajo esa actitud fiestera, que se contagió hasta a los concejales que en las primeras filas siguieron el certamen, salieron Los Chancletas. No se oían aún sus voces, cuando el graderío comenzó con su ovación, rompió en aplausos y preparó el cuerpo para lo que venía.
"¿Qué cómo se llama esa murga?", bastó para que Santa Catalina se viniese arriba. Los de La Isleta, que celebran esta edición su 35 cumpleaños, comenzaron con el primer tema, Fenómenos paranormales y para chicharreros, en el que revelaron lo que Mariano Rajoy fue en otra vida: el ganador de Eurovisión, aunque "en esta es un cabrón".
También tuvieron para María Isabel Bolta, a quien metieron en la misma olla en la que la edil había comenzado "su conjuro para hacer desaparecer a las murgas". Y no faltaron entre estos fenómenos las psicofonías en las que claramente se escuchó "Cardona dimisión". En su segunda interpretación, cargada de una dosis mayor de crítica, recordaron la situación que viven muchos estudiantes que tienen que emigrar con sus títulos del país, así como los recortes en Sanidad. Les llovió sobre el escenario, pero Los Chancletas estuvieron muy arropados por el público.
