Hospitales que sanan

Un complejo sanitario bien diseñado reduce la ansiedad y mejora la relación médico-enfermo a través de la arquitectura

Imagen exterior del Hospital Universitario de Akershus.

Imagen exterior del Hospital Universitario de Akershus. / dulce xerach pérez

Los hospitales no siempre son el lugar más alegre. Pero un hospital bien diseñado puede hacer que la relación entre un enfermo y su problema sea más amable, que la relación médico enfermo mejore en humanidad y que la recuperación de cualquier enfermedad sea más tranquila, amable y comprensiva con los que tienen que pasar por un trance así. Es decir, ayudan a la mejora de la salud con su arquitectura.

Porque la medicina es una mezcla de muchas disciplinas, por supuesto la primera la medicina, pero también la arquitectura, la investigación la ciencia y la buena gestión y, por supuesto, si todo lo anterior funciona esto propiciaría una mejor relación entre médico-enfermo, pues cuando el entorno ayuda se acaba levantando el ánimo de los pacientes y sus familias, así como el de los médicos y el personal hospitalario.

Hospitales que sanan

Hospitales que sanan / dulce xerach pérez

Hay hospitales que nada más acercarte quitan las ganas de entrar. Una vez en el hall, suelen ser son lugares inhóspitos donde parece que no eres bienvenido. Pero hay otros que en su concepción inicial, posterior diseño y posterior buena gestión consideran el bienestar físico y emocional de sus pacientes como factores tan importantes como los tratamientos médicos que estos reciben. Y en el futuro podrían ser mucho mejores incluso.

El paciente en el centro

Aquí tenemos algunos ejemplos muy diversos en estilo que están unidos por una característica fundamental: poner al paciente en el centro. Destacan por el cuidado y la previsión con que fueron pensados y diseñados para que sean lo más cómodos y a la vez eficientes posible para, no solo mejorar la relación médico-enfermo, que ya es algo importante que demasiadas veces se olvida por un personal desbordado y sin ganas de implicarse emocionalmente con cada paciente: son hospitales que ayudan a mejorar la salud de todos los que trabajan allí y los que están ingresados.

1.- Hospital Comunitario de la Península de Monterey, California, Estados Unidos

En la costa norte de California, Monterey es una ciudad que cuenta con una gran belleza natural. Construido a lo largo de Pebble Beach en la década de 1960 por el pionero Edward Durrel Stone, el Hospital Comunitario de la Península de Monterey incorpora esa belleza exterior directamente a su estética mediante la creación de unos espacios interiores confortables, iluminados y cálidos con un uso magistral de la luz, los jardines y otros elementos naturales. La estética de mediados de siglo de Stone luce tan acogedora y fresca hoy como hace 50 años.

Hospitales que sanan

Hospitales que sanan / dulce xerach pérez

2.- Hospital Universitario de Akershus, Lørenskog, Noruega: el más moderno de Europa

Diseñado por el galardonado estudio de arquitectura danés C. F. Møller Architects, el Hospital Universitario de Akershus está considerado el hospital más moderno de toda Europa.

Los usuarios señalan que el diseño del complejo te envuelve enseguida por la influencia de la alta prioridad otorgada a la luz natural por el diseño de todos los lugares de trabajo, las vistas del paisaje circundante y el contacto con el entorno exterior, destacando el uso generalizado de vidrio y madera, paneles que crean amables texturas variadas y espacios amigables, confortables e informales.

3.- Hospital Waterman de Florida, Estados Unidos

Como decíamos al principio de este artículo la austera y acéptica sensación institucional de un hospital puede hacer que un paciente se sienta incómodo al instante. Con la construcción del Hospital Waterman de Florida, el objetivo era disipar esa ansiedad con un diseño sereno y acogedor.

«Queríamos una instalación que no tuviera el aspecto tradicional de atención médica, para que los pacientes se sintieran más cómodos», en palabras de Mike Hoffmeyer, director de la firma de arquitectura RTKL Associates con sede en Dallas, quien completó el proyecto junto con Jonathan Bailey Associates en 2003.

El aspecto más interesante de este hospital es el atrio de tres pisos, que actúa como centro y vestíbulo principal del hospital, donde las ventanas circundantes ofrecen vistas tranquilas de los lagos y bosques aledaños, y su techo de tela de fibra de vidrio translúcida es lo suficientemente suave como para dejar pasar la luz pero lo suficientemente fuerte como para proteger a los pacientes y visitantes en el interior.

Dulce Xerach Pérez abogada y doctora en arquitectura. investigadora de la universidad europea