Más de 25.000 abuelos canarios sobreviven con 485 euros al mes

El Archipiélago es la región con el porcentaje más alto de jubilados que han de conformarse con pensiones no contributivas por no haber cotizado lo suficiente

Un pensionista camina hacia un paso de peatones para cruzar la calle.

Un pensionista camina hacia un paso de peatones para cruzar la calle.

M. Á. Montero

Un total de 25.172 canarios de más de 65 años sobrevive con 485 euros al mes. Son un 6,4% de los isleños de esa franja de edad. Un 6,4% de los abuelos del Archipiélago. El porcentaje por sí solo no dice gran cosa, e incluso podría parecer más bien bajo a simple vista. Nada más lejos de la realidad. No hay ninguna otra Comunidad Autónoma con una tasa tan alta de mayores de 65 años con ese bajo nivel de ingresos. Ni de lejos. No en vano, la región se ha convertido, para pesar de miles de jubilados, en el particular paraíso de las Pensiones No Contributivas (PNC). Esas pagas –que por su baja cuantía se asemejan más a un subsidio de emergencia que a una pensión propiamente dicha– que el Estado concede a los jubilados y a las personas en situación de invalidez que no tienen derecho a una prestación contributiva. Personas en estado de necesidad que por edad o por incapacidad no pueden trabajar y que durante su vida laboral no cotizaron a la Seguridad Social. O al menos no cotizaron el mínimo exigido –por lo general 15 años– para ganarse el derecho a una pensión contributiva.

El peso de los perceptores de estas pagas de mínimos duplica en las Islas la media nacional

El mes pasado, según los últimos datos oficiales, 42.736 canarios cobraron una PNC, ya fuera por haber llegado a la jubilación sin haber cotizado o por invalidez. En situación de invalidez están 17.564 de ellos. Entre estos últimos hay personas de todas las edades con un grado de discapacidad de al menos el 65% y en estado de necesidad, lo cual se determina en función de los niveles de renta y del número de familiares que convivan con el beneficiario. Los restantes 25.172 son perceptores de la prestación no contributiva de jubilación. Mayores de 65 que en sus vidas laborales no cotizaron ese mínimo legal, lo cual no necesariamente quiere decir que no hayan trabajado. Muchos, y sobre todo muchascasi un 70%, siete de cada diez, son mujeres–, trabajaron como quien más pero sin cotizar. Un caso habitual es el de esas mujeres isleñas que se deslomaron en tareas agrarias, como en las antiguas tomateras, pero en la economía sumergida. O que sencillamente tuvieron que emigrar en busca de mejor futuro. En cualquier caso, esos más de 25.000 canarios reciben cada mes por su PNC una media de 485,21 euros exactos. Son, en definitiva, jubilados pobres. Los que tienen la suerte de contar con apoyo familiar aún pueden escapar; a los demás no les queda otra que recurrir a ayudas o subsidios de emergencia y/o a los bancos de alimentos. Han de apañárselas como buenamente puedan.

Cerca del 70% de los beneficiarios de estas prestaciones son mujeres que no han podido cotizar

La paga media de los beneficiarios isleños de la PNC de invalidez es algo más alta –527,39 euros mensuales– pero también es de todo punto insuficiente para escapar de la pobreza. Y tres cuartos de lo mismo se observa, claro, si se considera el conjunto de perceptores. Esos casi 43.000 canarios en la nómina de beneficiarios de cualquiera de las dos modalidades de PNC –que son incompatibles entre sí, es decir, no puede cobrarse al mismo tiempo por jubilación y por invalidez– reciben así una media mensual de 502,86 euros.

Hay que tener en cuenta que la mayoría de quienes perciben la PNC de invalidez acaba por convertirse en beneficiario de la PNC de jubilación cuando alcanza la edad que establece la ley para el retiro laboral. De hecho, entre los 25.172 que cobran la no contributiva de jubilación hay 8.108 derivados de la nómina de invalidez. Esta estrecha relación entre los dos tipos de PNC es el motivo por el cual suele medirse el mayor o menor peso de estas pagas con el porcentaje que representan en la población de más de 65. Pues bien, resulta así que en el Archipiélago hay 11 pensiones no contributivas por cada cien mayores de 65 años. En toda España solo hay cinco PNC por cada cien abuelos, así que en Canarias más que se duplica la media. Es más, las dos autonomías que siguen a las Islas con el mayor peso de estos pensionistas pobres son Murcia y Andalucía, pero con solo un 6%, esto es, a muchísima distancia.

[object Object]

Cristina Valido, diputada de CC en el Congreso, viene peleándose por conseguir la mejora de las pensiones no contributivas que perciben cerca de 43.000 ciudadanos del Archipiélago. El último avance en pos de «mejores condiciones de vida» –en palabras de la propia diputada– para estas personas ha sido arrancarle a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, el compromiso de revisar unas prestaciones cuya cuantía es a todas luces bajísima. Tanto que esos casi 43.000 isleños apenas cobran cada mes una media de 502,86 euros. Son un 10% de todos los perceptores del país pese a que el peso de los canarios en el conjunto del Estado no llega al 5%.

Suscríbete para seguir leyendo