Gonzalo Bernardos lanza un serio aviso sobre los alquileres: "Acabarán viviendo en barracas"

El famoso economista ha criticado duramente las medidas del Gobierno que limitan el precio de estas rentas porque perjudican gravemente a las familias que menos dinero tienen

Gonzalo Bernardos cree que las medidas del Gobierno con los alquileres perjudican más que benefician

Gonzalo Bernardos cree que las medidas del Gobierno con los alquileres perjudican más que benefician

El precio con los alquileres de las viviendas es uno de los problemas principales con los que se encuentran las personas que se mudan a una nueva ciudad, y que se ve afectado por la baja oferta y la amplia demanda. En este contexto, el Gobierno aprobó una ley para limitar los precios, y que así los propietarios de estas casas no se aprovechen de la situación. Ahora, el economista Gonzalo Bernardos ha atacado la medida por considerar que perjudica a las familias más vulnerables.

El mercado del alquiler en España continúa su escalada imparable, situándose como uno de los principales desafíos para la economía española. El precio medio del alquiler ha aumentado un 8,5% en el último año, según datos del portal Idealista, alcanzando un máximo histórico de 11,5 euros por metro cuadrado.

Las grandes ciudades son las más afectadas por esta subida, con Barcelona a la cabeza con un precio medio de 16,3 euros por metro cuadrado, seguida de Madrid con 15,2 euros. En ciudades como Valencia, Málaga o Sevilla, el precio también supera los 10 euros por metro cuadrado. La subida del alquiler está teniendo un impacto negativo en los inquilinos, que cada vez tienen que dedicar una mayor parte de sus ingresos al pago del alquiler. Esto dificulta el acceso a la vivienda a muchas personas, especialmente a los jóvenes y las familias con menos recursos.

El Gobierno busca frenar las subidas

El Gobierno ha anunciado medidas para contener la subida del alquiler, como la limitación del alza de los precios en las zonas tensionadas o la ampliación de la duración de los contratos. Sin embargo, estas medidas aún no han tenido un impacto significativo en el mercado. Para poner un tope a estas subidas, el Ejecutivo aprobó en 2023 la Ley por el Derecho a la Vivienda, que introduce una serie de medidas para regular el mercado del alquiler y contener la subida de precios. Entre las medidas más destacadas se encuentran:

  • Limitación del precio del alquiler en zonas tensionadas: En las zonas declaradas como tensionadas, el precio del alquiler de los nuevos contratos no podrá superar el Índice de referencia del precio del alquiler. Este índice se calcula a partir de una serie de factores como la superficie de la vivienda, la ubicación, la calidad de las instalaciones, etc. Esto es aplicable por las CCAA y hasta el momento solo lo ha puesto en marcha Cataluña.
  • Ampliación de la duración de los contratos: La duración mínima de los contratos de alquiler se amplía a 7 años para los grandes tenedores (personas físicas o jurídicas con más de 10 viviendas) y a 5 años para los pequeños tenedores.
  • Prohibición de desahucios sin alternativa habitacional: Se prohíben los desahucios de familias vulnerables sin que se les ofrezca una alternativa habitacional adecuada.
  • Bonificaciones fiscales para los propietarios: Se establecen bonificaciones fiscales para los propietarios que bajen el precio del alquiler o alquilen a personas con bajos ingresos.

La ley ha sido criticada por algunos sectores por ser insuficiente, ya que no se aplica a todos los contratos de alquiler y no limita el precio de los alquileres ya existentes. Una de esas críticas ha sido la de Gonzalo Bernardos, que no ve un futuro claro en este ámbito.

"El pijo-progre paga 500 euros menos de lo que podría pagar"

El doctor en economía cree firmemente que este tipo de medidas provoca una separación y una segregación en función del nivel socioeconómico. Según Bernardos, este tope al precio del alquiler beneficia únicamente a los sectores más acomodados de la sociedad, y admite que esto solo hace que el "el pijo-progre pague 500 euros menos, de lo que podría pagar".

El profesor de la Universidad de Barcelona ha dividido a las personas que buscan un alquiler "itinerante" en tres grupos: "primero están los estudiantes que van a estudiar a las Universidades de Barcelona o Madrid, segundo hay bastantes trabajadores desplazados y tercero, hay muchísimos extranjeros que vienen temporalmente. Todos estos tres tipos cumplen el perfil para ser alquileres de temporada, y no por el tiempo, sino por la causalidad".

Estos grupos de personas que quieren "alquileres temporales" no se beneficiarán de la medida de tope de precios de alquiler, ya que no están buscando un arrendamiento a largo plazo. Según Bernardos, esto afectará a las personas más vulnerables en comparación con aquellos que pueden pagar un alquiler más elevado. Esta diferenciación de clases, unida al tope del precio del alquiler, generará un problema grave en la sociedad. Por último. Gonzalo Bernardos rompe una lanza en favor de estas familias más pobres arremetiendo contra los políticos: "Vais a conseguir que la gente viva en barracas".