Identificados los responsables de la 'rave' ilegal en un espacio protegido de Canarias

Las imágenes difundidas muestran a los organizadores transportando los equipos de sonido hasta la cima del volcán, grabando la sesión musical con múltiples cámaras y un dron, todo ello ante la mirada atónita de los senderistas que se encontraban en la zona

Fiesta ilegal en un espacio protegido de Fuerteventura

C. A. C.

En un desafortunado suceso ocurrido durante el pasado fin de semana, el Ayuntamiento de La Oliva ha logrado identificar a los responsables de una polémica fiesta realizada en la cima del volcán Calderón Hondo. El evento, que atrajo a alrededor de un centenar de asistentes, consistió en una sesión de DJ con elaborada producción audiovisual, altavoces y equipos musicales. Este acontecimiento ilegal se llevó a cabo sin la debida autorización y fuera de los límites del sendero designado, en un área natural de alto valor paisajístico incorporada a la Red de Senderos de Fuerteventura (GR-131), y ubicada en las proximidades de dos zonas protegidas: ZEC y ZEPA (Zona de Especial Conservación y Zona de Especial Protección para las Aves).

Las imágenes difundidas muestran a los organizadores transportando los equipos de sonido hasta la cima del volcán, grabando la sesión musical con múltiples cámaras y un dron, todo ello ante la mirada atónita de los senderistas que se encontraban en la zona.

El concejal responsable del área de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de La Oliva, David Fajardo, expresó su profundo pesar por los hechos y afirmó que se tomarán medidas enérgicas para prevenir que situaciones similares se repitan en el futuro. La Policía Local de La Oliva ha logrado identificar a algunos de los organizadores y procederá de inmediato a presentar las correspondientes actas de denuncia.

Según una evaluación preliminar, los acontecimientos podrían constituir diversas infracciones conforme a la Ley 42/2007, del 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y la Biodiversidad de Canarias. En un comunicado adicional, el Cabildo insular ha señalado que las sanciones por estas violaciones pueden oscilar entre los 3.000 y los 200.000 euros. Este escándalo ha generado una oleada de rechazo social en toda la isla, destacando la importancia de preservar y respetar los espacios naturales protegidos.