Fiestas Patronales de Santa Lucía | Celebraciones en el Día Grande

La Virgen de Santa Lucía ilumina a sus fieles en su gran fiesta

El casco aupó a su patrona con las Lucías, sueca y canaria, lágrimas y menos visitantes

«Santa Lucía, Santa Lucía. Menguan las noches y crecen los días y cantas la Pascua en 12 días». Forma parte del refranero popular en el pequeño e idílico casco de Santa Lucía de Tirajana, que ayer 13 de diciembre celebró el Día Grande de sus fiestas patronales del 7 al hasta 17 de diciembre. Hizo buen tiempo aunque con algo de calima. Menos afluencia de personas pero la justa para encumbrar al pueblo. También los negocios hicieron su agosto en diciembre.

El casco celebró este encuentro de fe, peregrinaje y celebración con el recibimiento oficial por parte de la Corporación municipal en las Casas Consistoriales de la Lucía sueca Frida Simone Fridriksdóttir y la canaria Raquel López, con 3 homilías, su procesión con mantillas, desfile de ganado y ofrenda de los niños a su Virgen.

Entre los asistentes, un poco menos este año, una mujer casi con lágrimas, decía: «¡Ay virgencita mía! Ay mi Virgen de Santa Lucía, mi niña linda, cuánto te quiero». Todo eso mientras se acercaba al portón de la iglesia de donde sacaban la imagen de Santa Lucía.

Pero antes, llegaba al casco la Lucía sueca, luciendo su atuendo con corona de velas en la cabeza y ataviada con la ropa típica de su localidad sueca de Luleâ para cumplir un hermanamiento que data de 1963. De 19 años, se mostró encantada por haber sido elegida para perpetuar el hermanamiento entre Santa Lucía y su localidad sueca, donde también celebran a Santa Lucía. Hizo un inciso para explicar que en su ciudad están a 10 grados bajo cero o que la celebración es distinta, con un paseo con luces y velas de las lucías y vecinos. Y algo le llamó mucho la atención. Dijo entre bromas que en su pueblo se celebra la fiesta «un solo día, pero aquí son unos diez» . Luego partió en comitiva hacia las Casas Consistoriales con la Lucía canaria para ser agasajadas en el salón de actos de las Casas Consistoriales con el cuerpo municipal al completo y otras autoridades.

Lo que tiene de pequeñito y bucólico este rincón grancanario lo tiene de grande en cuanto al fervor y devoción por Santa Lucía, no solo de los lugareños, sino de los peregrinos que llegaron de todos puntos de la isla para cumplir sus promesas. Fue un día con grandes acontecimientos, entre ellos, la invitación de los santaluceños a vivir de cerca su tradición. Entre ellos, Conchita Ramírez, la pregonera de este año y persona histórica, activa y señera de la fiesta y también por su papel en el Juicio al Haragán de hoy. También sirvió de anfitriona ayer para explicar, siempre con gracia, talento y sabiduría, los aconteceres de esta gran fiesta mientras acudía a los eventos en un segundo plano. Su hermano Margarito y Daniel Arencibia fueron los encargados de dar lustre a la Virgen y toda la iglesia con 400 anturios, que tardaron en colocar más de ocho horas.

Tras el agasajo a las Lucías se partió en comitiva a la iglesia del casco, donde se celebró la tercera de las homilías. Fue la oficial y las anteriores, para peregrinos. Se trató de uno de los eventos de mayor acercamiento a la patrona en sus años de celebración. Se respiraba el fervor en un día grande. La emoción no cabía entre vecinos y suecos que se encontraban de vacaciones o de senderismo como Miguel, alemán que iba a Fataga pero vio la fiesta y se quedó. Tras la homilía salió en procesión la imagen de la Virgen por el pueblo. Tras retornar a la iglesia desfiló el ganado delante de todos y posteriormente, con una banda de música volcada en el pasodoble Islas Canarias, ofrenda de los niños.

Los negocios hicieron su agosto, duplicando de 5 a 10 euros el parking y en restauración cuadruplicaron visitas.

El refrán dicho por Francisco Medina que le enseñó su madre, explica que desde la fiesta de Santa Lucía el día dura un minuto más y se recorta otro tanto la noche. Y si se hace recuento, desde ayer a Navidad solo faltan 12 días.

El Día grande de la Patrona de Santa Lucía fue ayer el aperitivo para otros platos fuertes que se avecinan en lo que queda de fiesta. Hoy se celebra uno de los más originales y divertidos: el Juicio al Haragán. El muñeco confeccionado por Juan Ramírez sale a las 18.00 horas por las calles con vecinos y desfile de papahuevos para terminar con el juicio. Mañana, baile de Taifas; el sábado, el juego ¿Dónde cagará Marinera; y el domingo 17, a las 13.00 horas, Romería de los Labradores.|