Colorido vivaz, penumbra y nostalgia

La capital de la Isla mantiene su oferta cultural con nuevas propuestas que la población de Arrecife y del resto de Lanzarote podrán disfrutar durante las próximas semanas e incluso meses. Destacan por su apuesta las exposiciones Armonía abstracta, en la Casa de la Cultura Agustín de la Hoz, de la artista Luisa Urréjola, y Saudade, un proyecto expositivo del artista Antonio Seijas y la escritora Natacha G. Mendoza en el que pintura y literatura se unen para crear atmósferas llenas de nostalgia y soledad. Ambas muestras se inauguraron el viernes.

'Armonía abstracta'

Luisa Urréjola trae Armonía abstracta a las salas de la Casa de la Cultura Agustín de la Hoz de Arrecife para proponer, a través del lenguaje abstracto, una singular e inmersiva experiencia plástica y visual. La creadora grancanaria consigue que su trabajo se despoje formalmente de los límites y contornos clásicos de los cuadros, otorgando al color y a la luz su papel como elementos autónomos y organizadores de esta exposición que podrá disfrutarse hasta el 8 de julio.

A través de formas planas, fragmentadas o recortadas, organizadas en composiciones, variaciones y series, la artista crea una atmósfera cromática, luminosa y poética. La variedad de planos, segmentos o manchas en diferentes colores y tonos, así como el uso de determinadas transparencias y texturas acaba convirtiendo a la materia plástica en objeto artístico en sí mismo. La exposición funciona a modo de evasión de las convenciones interpretativas de la pintura, incluidas las que buscan un significado transcendental o funcional en la obra artística.

Esta muestra, que ya ha sido exhibida en el Centro de Arte ‘La Regenta’ y en la Sala de Arte del Instituto de Enseñanza Secundaria Canarias Cabrera Pinto de La Laguna del Gobierno de Canarias, ha sido posible gracias a la colaboración institucional del Área de Cultura del Cabildo de Lanzarote, de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Arrecife y de la Viceconsejería de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Canarias.

De manera complementaria se tiene previsto un programa de visitas guiadas a las citadas exposiciones, a cargo de la historiadora del arte Estefanía Camejo. La duración de las visitas será de una hora aproximadamente. La asistencia es libre y gratuita, hasta completar el aforo máximo de las salas. Las fechas y horarios son: sábado, 22 de abril, 12 horas: martes, 9 de mayo, 18 horas; sábado, 20 de mayo, 12 horas; sábado, 3 de junio, 12 horas; martes, 20 de junio, 18 horas; sábado, 1 de julio, 12 horas y martes, 4 de julio, 18 horas. Asimismo, estas exposiciones podrán disfrutarse en horario de lunes a viernes, de 10:00 a 13:30 horas y de 17:00 a 20:00 horas, así como los sábados de 10:00 a 14:00 horas, a excepción de los domingos y días festivos. La entrada es libre y gratuita.

'Saudade'

La Biblioteca Insular, centro dependiente del área de Educación del Cabildo de Lanzarote, exhibirá hasta el 7 de mayo la exposición Saudade, una propuestas del artista Antonio Seijas y la escritora Natacha G. Mendoza en el que pintura y literatura se unen para crear atmósferas llenas de nostalgia y soledad. Podrá visitarse en el horario habitual de este espacio cultural.

La muestra está conformada por 22 acrílicos, obra de Antonio Seijas, inundados de penumbra. Una penumbra necesaria para que la luz emerja flotando silenciosa pero rotunda y muestre la verdadera medida de la oscuridad que nos rodea. La luz cobra así una importancia simbólica en su obra, además de la visual, en la que se muestran unos paisajes que parecen estar fuera del tiempo y escenas que parecen no avanzar ni detenerse, ajenas a nuestra realidad.

La parte literaria de la exposición viene aportada por la autora canaria Natacha G. Mendoza, con relatos pertenecientes a sus libros Los Bares del Diablo (agotado y pendiente de una nueva edición revisada y ampliada) e Historias Mínimas (finalista en los XXVIII Premios Andalucía de la Crítica), así como un gran número de textos inéditos que ha cedido para la ocasión.

Estos relatos que forman parte de la exposición, acompañando cada uno de los cuadros, fueron la inspiración original para la creación de las pinturas, que tratan de ahondar y fundirse en el ambiente melancólico y solitario que los habitan. A partir de los libros de Natacha, Antonio Seijas fue desarrollando en imágenes todo ese mundo propio y a la vez compartido, que nace de su forma de sentir los relatos. En los acríclicos una luminosidad silenciosa y cargada de simplismo emerge de entre la penumbra para alumbrar escenas que espera a ser contempladas por las personas expectadoras.