El número de implicados en los hurtos a la Cooperativa Farmacéutica de Canarias (Cofarca) asciende ya a 24 personas, entre ellas un farmacéutico, aunque la Policía "no descarta" más detenciones, sostuvo ayer Eduardo Belda, jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violencia. Aparte de robar para vender lo sustraído a farmacias mediante representantes comerciales, las dos tramas que operaban en Cofarca también facturaban medicamentos de manera fraudulenta al Servicio Canario de Salud (SCS). En concreto quitaban los códigos de barra a los fármacos y los pegaban en recetas que tenían a su disposición para pasarle la factura al SCS a través de las farmacias.

Se han intervenido más de 100 recetas, aunque el supuesto fraude está por determinar, según explicó el inspector Belda, que compareció junto a varios mandos policiales para explicar detalles de la denominada operación Lyrica. Se trata de una "amplia trama delictiva sumamente organizada", que sustraía medicamentos, vacunas y otros productos farmacéuticos desde hace siete u ocho años. De ahí que la primera y segunda fase de la operación se centrara en "evitar el tráfico de medicamentos por el riesgo que conlleva para la salud", añadió Belda, que estuvo flanqueado por la delegada del Gobierno en Canarias, Carolina Darias, así como por la jefa superior de la Policía, Concepción de Vega.

La investigación policial se centra ahora en una tercera fase, consistente en determinar las farmacias que se han beneficiado de la trama porque conocían la procedencia ilícita de la mercancía. Luego se abordará una cuarta fase para tratar de acreditar el fraude al SCS. La Policía calcula que el perjuicio económico causado a Cofarca supera los 800.000 euros, aunque sólo en enero sufrieron pérdidas por valor de 122.000.