Después de más de un año buscándolo, la ciudadana alemana Sevda Bender ha encontrado por fin a su padre, un músico de la capital grancanaria, llamado Carlos Rodríguez. La joven de 32 años prepara un viaje a la capital grancanaria para conocer al guitarrista.

Ambos quieren mantener el encuentro en privado, según aseguró Melanie Görtz, una amiga de Sevda que ha actuado de intermediaria en la búsqueda y cuyas gestiones han sido fundamentales para conseguir este final feliz. Dagmar, la madre de Sedva, viajó a la capital grancanaria en mayo de 1986, de vacaciones con una amiga. Fue durante este viaje que Dagmar conoció a Carlos. Ambos tuvieron un fugaz romance, fruto del cual nació Sedva, que se enteró hace uno dos años de que su verdadero padre vivía en Canarias.

Desde entonces emprendió la búsqueda, con los escasos datos que su madre recordaba, empeñada en conocer a su padre y a sus posibles hermanos. Y al final lo ha conseguido.

Según explica Görtz a este periódico, "Sevda y su padre ya tienen contacto y ambos han confirmado que se trata del Carlos Rodríguez" que buscaba la alemana. Görtz añade que antes de hacer público el encuentro, Sevda "prefiere viajar primero a Gran Canaria y organizar una entrevista privada", al tiempo que ruega que se respete la privacidad de ambos.

Melanie Görtz, que vive a caballo entre Alemania y la capital grancanaria, agradece la colaboración de este periódico en la búsqueda de Rodríguez. De hecho fue el comentario de una lectora, tras leer la noticia en la cuenta de Facebook de este periódico, la que puso a las mujeres en la pista definitiva.

Así lo hacía saber la propia Melanie el sábado pasado a través de un comentario a la noticia en el Facebook de laprovincia.es.

"Gracias por la participación y la ayuda en la búsqueda del padre de Sevda", escribía Görtz el pasado 23 de febrero en un comentario a la noticia, antes de dar con la pista definitiva. "Tenemos ya varias buenas pistas gracias a la publicación de LA PROVINCIA. En el caso de que tengamos una certeza del 100% y contemos con el acuerdo de las personas implicadas se publicará el "final feliz" de la historia".

Y es que muchas personas que pensaron que sabían quien era el Carlos Rodríguez que buscaban se movilizaron y contactaron con Görtz o aportaron su pista en los comentarios a la noticia. Así lo hizo por ejemplo Estrella Suárez, quien decía lo siguiente: "Hay un guitarrista que se llama Carlos Rodríguez en Las Palmas. Es moreno y no muy alto. Búscalo en Facebook, que tiene más o menos 55/57 años".

Mensajes

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Mensajes como este y muchos otros se repitieron a lo largo de la mañana del pasado sábado. Uno de ellos fue clave, el de Ana Hernández Artiles, porque facilitó el perfil del Facebook de Carlos Rodríguez. A partir de esta pista, la localización se tornó pan comido.

La tarde de ese mismo sábado Görtz comunicaba a esta redactora a través de un mensaje que había recibido la llamada de un señor que se identificó como amigo de Carlos Rodríguez y que permanecía a la espera de la llamada del padre. "Sedva está muy contenta y yo sólo quiero comprobar que realmente es su padre", explicaba feliz la ciudadana alemana, que tiene una empresa de costuras, al tiempo que se quejaba de los comentarios "feos y dolorosos" que también aparecieron, junto con los que ofrecían su ayuda.

Y también este periódico ha estado recibiendo llamadas telefónicas de numerosas personas que nos hablan de Carlos, de su madre, de su dirección y muchos otros datos que no vamos a desvelar por respeto a la petición que han realizado los protagonistas de la noticia, a través de Gört, que solicita no sacar a la luz más datos de los que ya se facilitaron a los medios para localizar al progenitor.

Viva imagen

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Entre las llamadas recibidas figura la de una persona que aseguraba que Sevda se parece mucho a su abuela paterna.

La historia de los padres de Sevda es similar a la de miles de romances que han florecido en estas tierras turísticas, aventuras efímeras, con fecha de caducidad, que se acaban con las vacaciones. La diferencia en esta ocasión, radica en que Dagmar se quedó embarazada y nació Sevda.

Dagmar estuvo un mes de vacaciones en Canarias, a donde vino acompañada de su amiga Sussane. Durante los primeros días conoció a Carlos en una salida nocturna en un pub de la capital, donde el bajista actuaba. Los tres y un amigo de Carlos se convirtieron a partir de entonces en un grupo inseparable y viajaron a Lanzarote y a La Graciosa, una visita en la que casualmente coincidieron con la expedición que hicieron a la isla los entonces reyes de España el 21 de mayo de 1986.

Finalizaron las vacaciones y Dagmar, que ahora tiene 58 años, volvió a Neumünster, una ciudad del oeste de Alemania y allí siguió su vida. Conoció a un ciudadano turco y se casó con él. Carlos volvió a Alemania semanas después del viaje a Canarias, pero la historia se truncó.

Sevda tiene en la actualidad 32 años recién cumplidos. Nació un 16 de febrero. Es trabajadora social y tiene un puesto de responsabilidad en una empresa de Berlín. Tiene novio, con el que proyecta casarse y tener hijos. Según su amiga Melanie, "ella sólo quiere saber quién es su padre, conocer sus raíces".