Una pelea multitudinaria en las Ramblas de Jinámar, en la que estuvieron implicados varios menores de un piso de acogida del barrio, se saldó con la detención de un vecino mayor de edad por las lesiones que causó, supuestamente, a uno de los chicos, que tuvo que ser asistido en un centro sanitario. La Policía Nacional ha abierto una investigación y continúa con las labores de identificación de las cerca de veinte personas que participaron en el altercado que se desató la noche del pasado martes. No descarta nuevas detenciones. La Fiscalía del Menor, por su parte, está pendiente de recibir el atestado policial para abrir una investigación.

Mientras los vecinos achacan el origen de la pelea a la "conflictividad" que provocan desde hace varios meses varios de los chicos tutelados, desde el Gobierno canario y el Cabildo de Gran Canaria aseguran que lo ocurrido es un "caso aislado" y que "los agredidos han sido los menores" del centro.

Estos menores, de nacionalidad marroquí, han sido trasladados a otro centro de la ciudad como "medida preventiva" y para evitar que "vuelvan a ser agredidos", indicaron desde el Gobierno canario y el Cabildo de Gran Canaria.

El piso tutelado de la Rambla de Jinámar, en el que viven diez menores en situación de desamparo, está gestionado por la Fundación Diagrama Intervención Psicosocial.

Los chicos, en su inmensa mayoría de nacionalidad española, están bajo la tutela del Gobierno canario y la gestión corre a cargo del Cabildo de Gran Canaria, que ha adjudicado el servicio a la Fundación Diagrama. El centro funciona en Jinámar desde hace diez años -aunque hasta 2016 fue solo centr de día- y ha pasado desapercibido hasta que hace unos meses comenzaron los problemas con los vecinos del lugar, que atribuyen los problemas a varios menores extranjeros y la "falta de control" sobre los mismos por parte de los educadores.

Los vecinos de Las Ramblas reclaman, a través de un comunicado, el cierre del centro porque "la convivencia es insostenible". Fuentes de la Dirección General de Protección a la Infancia y la Familia del Gobierno canario, que dirige Iratxe Serrano, indicaron que el piso tutelado de Jinámar es atendido por un director y cuatro educadores y aclararon que no se trata de un centro de medidas judiciales. "Los chicos están integrados en el barrio y algunos participan en el equipo de fútbol de Jinámar. Durante estos diez años han pasado algunas cosas, pero lo del pasado martes fue un caso aislado", señalaron las fuentes.

Según la versión que los educadores del piso tutelado, que contrasta con la de los vecinos, la pelea fue provocada por residentes que insultaron a uno de los menores extranjeros con gritos como "moro de mierda", cuando este volvía al centro a cenar.

El chico, añadieron las fuentes de la Direccción General de Protección a la Infancia y la Familia, "llegó al centro diciendo que fuera había un grupo de tíos, no todos de Jinámar, que lo habían insultado y que le querían pegar y entonces salieron dos a defenderlo y se armó la pelea".

La paliza

"A estos dos menores le dieron una paliza. Uno de los que sale en el vídeo tirado en el suelo es uno de ellos", aseguron.

En el mismo sentido se pronunció la consejera de Política Social del Cabildo de Gran Canaria, Isabel Mena. "La información que tengo del centro y de los menores agredidos es que la pelea no la provocaron ellos. No sabemos si hay un conflicto que viene de atrás, pero el deber del Cabildo y del centro es protegerlos y es lo que ha hecho en todo momento", añadió. "Han agredido a dos menores que están en un centro de protección del Cabildo. No han sido ellos los agresores", destacó.

Mena rechazó la posibilidad de cierre del recurso, que reclaman los vecinos y aclaró que no es un centro de Menores Extranjeros no Acompañados (Menas). "Es un centro que durante diez años ha prestado servicios dirigidos a la protección de los menores y no ha habido ningún problema. No tiene sentido que después de tanto tiempo se solicite el cierre porque ha habido un problema" , consideró la responsable de los servicios sociales, que añadió que se trata de "menores en desamparo que están integrados en el barrio y en los centros educativos y sanitarios y no se tienen por qué desarraigar".

Las críticas

Por su parte, los representantes vecinales de Las Ramblas aseguraron que la pelea se inició porque uno de los chicos implicados "insultó y le faltó al respeto a una persona mayor".

"Los vecinos" , resaltaron en un comunicado, vienen "soportando desde hace tiempo situaciones de violencia y escándalos, no solo en los alrededores del centro, sino los que se generan dentro del mismo", que está ubicado en dos locales de la planta baja de uno de los bloques. "Hemos llamado en reiteradas ocasiones a la Policía y tiene que haber constancia de sus atestados" , añadieron. "Hemos hablado con los monitores" del centro de menores, que "a veces nos han pedido ayuda porque no pueden mantener tranquilos a sus usuarios y nos comentaron que mandan informes diarios de estas situaciones a la dirección del centro y, aún así, no se toman las medidas necesarias para controlar estas situaciones", se quejaron.

Frente a la versión facilitada por las instituciones, los vecinos advirtieron que, "a excepción de dos o tres usuarios que asisten a formación, el resto permanece horas en las calles, en los alrededores del centro, consumiendo sustancias tóxicas y atrayendo al entorno a jóvenes de otras zonas" , lo que refleja que "no existe ninguna clase de régimen de comportamiento, ni horarios. Algunos ni siquiera son menores. En ocasiones da miedo salir del bloque. La situación es insostenible". Denunciaron por último que los locales donde está el centro "no tienen cédula de habitabilidad" .