Aula de Órgano del Conservatorio Superior de Música de Canarias

Juan Luis Bardón González presenta su recital de fin de carrera en la especialidad de Órgano. Un recorrido por la música de este instrumento desde el siglo XVII hasta el XX, con especial mención a la flamante escuela alemana.

El organista Juan Luis Bardón González nos ofrece a través de su recital de fin de carrera, un repertorio que recoge obras de los últimos cinco siglos, con un claro guiño a la escuela alemana.

El músico, que empezó a recibir clases de introducción a la música cuando tenía 4 años, recibió algunas clases de organistas alemanes afincados en Tenerife como Joseph Fleshurt o Hans Peter Reiners.

Bardón González ha participado en varias ediciones de la Academia de Órgano Fray Joseph de Echevarría, a través de la cual ha podido profundizar en el ámbito de la interpretación con Montserrat Torrent, Roberto Fresco, Paolo Crivellaro o Bernhard Haas, entre otros.

En su recital de fin de curso está presente Buxtehude, una de sus grandes figuras al desarrollar una estética exuberante, influenciada por el llamado stylus fantasticus, como se aprecia en su Preludio, Fuga y Chacona en Do Mayor.

Precisamente el gran Johann Sebastian Bach heredaría buena parte de los recursos de este maestro, visibles en su célebre Passacaglia de veinte variaciones con una monumental fuga final. Del genio de Eisenach escucharemos también el contemplativo preludio sobre el coral Schmücke dich, o liebe Seele y la Sonata nº 5 en Do Mayor, escrita en trío con fines didácticos.

Tras un pequeño intermezzo a la española, con el sonar de los clarines del padre Soler, llega el turno de un admirador de Bach: Felix Mendelssohn, cuyo estilo fusiona la tradición clásica con el lirismo romántico. Prueba de ello es su Sonata en Re Menor sobre el coral Vater unser im Himmelreich. Posee una estructura singular, pues tras cuatro movimientos a modo de variaciones, introduce una fuga de corte tradicional, para concluir con un devoto andante.

Por último, como epílogo místico, el culmen de La Navité du Seigneur: Dieu parmi nous (Dios entre nosotros), donde Messiaen, con sus coloridas sonoridades, ilustra la presencia triunfal y mayestática de la divinidad.