Artículos de broma

Huevos y demografía

Los huevos de gallina son una buena forma de consumir zinc

Los huevos de gallina son una buena forma de consumir zinc / Foto de Daniel Tuttle en Unsplash

Javier Cuervo

Javier Cuervo

El huevo, como nonato, es inocente, es un alimento de la granja del limbo de los justos, Tan estudiado gastronómica y dietéticamente, merece una tesis desde el punto de vista reputacional, ahora que recupera el prestigio sin haber perdido nunca la fama y que le sobran relaciones públicas pese a que nunca dejó de gustar. Los estudios sobre el colesterol le quitaron el buen nombre entre una parte de la población.

Durante siglos fue un alimento aspiracional, incluso entre personas que crecieron oyendo a sus mayores decir «cuando seas padre, comerás huevos» a pesar de que, siendo hijos, ya los comían. El refrán que oían los hijos del desarrollismo a los de la posguerra venía de tiempos de nutrición muy pobres en que quien salía a hacer tareas muy duras necesitaba más proteínas que los demás porque con ellas, transformadas en trabajo, aportaba a la familia los nutrientes de la supervivencia.

Los estudios sobre el colesterol que alertaron sobre el consumo de huevos tienen más de 60 años y hay personas de hoy que tienen alto el colesterol malo y siguen limitándolos en la dieta a pesar de que en el mundo actual hasta los huevos tienen influencers que los publicitan, cocineros que los elevan a ambrosía y la apología de Paul Newman en «La leyenda del indomable» que zampó 50 seguidos.

Se pueden leer muchas noticias sobre la cantidad newmaniana de huevos que se pueden -algunos dicen «deben»- comer a la semana, pero se oculta con frecuencia que se refiere a la persona sana. En cuanto se relaciona con colesterol se ve que el indulto es parcial, que se pueden comer algunos huevos más a la semana y mojarlos con pan, pero sin panacea. Olvídese de presentar una demanda colectiva por el gusto cesante de 20 años de restricciones.

Lo que no se ha estudiado es la relación entre comer huevos y ansiar la paternidad. Desde que no hace falta ser padre para comer huevos se ha dado la vuelta la pirámide de población y se encargan de mantener la natalidad personas con dificultades para comer huevos. Ahí lo dejo.

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