El decano del Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife, Iván Pérez Peña, ha animado este jueves a las personas afectadas por un desahucio a que pierdan el miedo y la vergüenza de acudir a un profesional de la Psicología para que les ayude a afrontar la situación.

Durante una entrevista a Efe, Iván Pérez Peña reconoce que la mayoría de las personas que están en una situación de desahucio tienen sentimientos profundos de vergüenza y culpa, y destacó la importancia de acudir a un profesional de la Psicología para recibir herramientas con las que enfrentarse a la situación.

El pasado 6 de marzo el Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife y la Plataforma de Afectados y Afectadas por las Hipotecas de Tenerife firmaron un convenio por medio del cual las personas afectadas por desahucios recibirán asistencia psicológica de forma gratuita.

El acuerdo incluye 33 sesiones de terapia clínica, valoradas en 2.000 euros, que serán soportadas económicamente por la institución colegial y los psicólogos que se ofrezcan a prestar la asistencia.

Desde entonces se han recibido ocho peticiones de ayuda, indicó Iván Pérez Peña, quien insistió en que es muy difícil salir de las situaciones que provocan los desahucios, pues se trata de personas que también sufren una presión constante por parte de las entidades bancarias y de las instituciones.

Es preciso revertir la situación porque cuando alguien recibe muchos palos llega un momento en el que asume el castigo porque se ha perdido la fuerza y se aprende a estar indefenso, algo que es desastroso para la sociedad y no se puede permitir, dijo Iván Pérez Peña.

Los profesionales de la Psicología se plantean si trabajar sólo con el individuo para ayudarle a buscar su felicidad individual, o tener conciencia social y, comentó Iván Pérez Peña, te das cuenta de que o te implicas o se rompe la cohesión social.

Vivimos en sociedad y el psicólogo trabaja con dos herramientas básicas, como son enseñar a relajar y a tener habilidades sociales, algo que puede ser en beneficio propio o colectivo, y debe orientarse hacia el segundo porque "siempre" redunda en el primero, pero no ocurre lo mismo a la inversa, indicó.

El psicólogo nunca te dirá qué tienes que hacer, sino que te facilitará herramientas para conseguir lo que deseas, y te acompañará en el camino para hacerlo de la mejor manera posible, dijo Iván Pérez Peña.

El decano del Colegio de Psicología de Santa Cruz de Tenerife recordó que no hay varitas mágicas sino que se requiere esfuerzo y constancia para cambiar las situaciones, y señaló que en los desahucios hasta hace poco tiempo parecía que la responsabilidad era sólo de quienes dejaban de pagar la hipoteca.

Pero no, y había una gran mentira sobre ello, pues poco a poco se ha cambiado la forma de analizar la situación y la responsabilidad no es sólo de quien pidió el crédito, agregó Iván Pérez Peña.

Muchas de esas personas no pueden acudir a una consulta privada porque no tienen recursos económicos, y el servicio público carece de personal suficiente para atender a quienes lo necesitan, por lo que el Colegio de Psicología se ha ofrecido para ayudar, destacó su decano.

Es preciso analizar mejor la realidad, ver que ni te persiguen continuamente ni todo es negativo, pues, aunque parezca mentira, lo que sucede suele ser positivo, pero los seres humanos tenemos una cierta fijación en lo negativo, en la incapacidad de disfrutar de la vida, declaró Iván Pérez Peña.

Así, puso como ejemplo que si una mañana no funciona el microondas nos enfadamos, pero todos los días que sí lo hace de forma correcta no se monta una fiesta, y eso, señaló, se debe a la tendencia del ser humano a evaluar lo negativo por encima de lo positivo.

Ser negativo no es una patología y se puede entrenar para ser positivo, para tener una percepción realista pero positiva de la vida, insistió Iván Pérez Peña.

Pidió que se pierda el miedo a acudir a los profesionales de la Psicología, pues, reiteró, no juzgan al paciente o usuario, sino que facilitan herramientas para enfrentarse a la realidad, y si bien ser pesimista no es una patología sí provoca malestar continuado que puede terminar en depresión.