Un total de 19.510 personas con discapacidad -prácticamente el 10% de toda España- reciben una pensión no contributiva por invalidez en Canarias, es decir, aquella que se le proporciona a las personas que no han trabajado lo suficiente como para recibir una pensión. Así lo constata el informe Olivenza 2018, sobre la situación general de la discapacidad en España, que también vislumbra que Canarias es la tercera comunidad con mayor número de personas en esta situación, detrás de andalucía (44.712) y Cataluña (26.471). Una ayuda que ronda los 390 y los 500 euros, según Ana Mengibar, portavoz de Queremos Movernos.

Cabe recordar que el empleo para una persona con discapacidad no solo le permite adquirir una mayor autonomía económica, sino que esta contratación significa una bonificación para las empresas al tiempo que ahorra dinero a las arcas públicas. "Es una torpeza por parte de la Administración", afirmó Mengíbar, que hizo hincapié en que "no es lo mismo un canario que contribuye que uno que se encuentra en el sistema de pensiones".

En las Islas, el número de personas con discapacidad administrativamente reconocida roza las 92.000, lo que sitúa al Archipiélago en tasas inferiores al resto de España que, con una prevalencia media de 72,86 casos por 1.000 habitantes, supera con creces este índice en Canarias (43,62 casos).